Debido al avanzado ritmo de penetración de la tecnología en el día a día y la transformación digital iniciada por la pandemia, se han consolidado carreras como las ingenierías informáticas y ha sentado las bases para los estudios centrados en el análisis y procesamiento de datos, en la aplicación de la inteligencia artificial o en el desarrollo de la robótica.

También se han reorientado algunas carreras como los estudios de administración o dirección de empresas, a los que se les ha incorporado asignaturas que tienen que ver con la innovación, la sostenibilidad o el desarrollo del talento de los equipos.

La capacidad empática es esencial para conectar con las audiencias. | Foto: El País

Según Helena López-Casares Pertusa, doctora en Neurociencia Cognitiva de las Organizaciones y docente en la Universidad Internacional de Valencia (VIU), se está “en un momento muy interesante para la aparición de nuevos trabajos. Sin duda, tiene un impacto en las carreras universitarias y en los estudios de posgrado, ya que las universidades deben diseñar programas que desemboquen en la empleabilidad de los estudiantes”.

Creación de carreras

Según la experta, el contexto de cada país y las condiciones del macroentorno de cada área influyen en la creación de determinadas carreras y en su evolución.

Es que los sistemas económicos y las áreas en crecimiento son determinantes para las carreras o estudios que los estudiantes demanden. Por ejemplo, en áreas donde el turismo sea una fuente de ingresos importante y condiciona la estructura económica de la zona, estos estudios serán más demandados porque son fuente de trabajo y constituyen una salida profesional.

Cada ser humano es único, singular e irrepetible, por lo que cada uno tiene su estilo, su impronta y deja su huella personal.

Destacó el terreno que están ganando los dobles grados, donde se relacionan áreas del saber, que ofrecen al estudiante un prisma muy interesante de la realidad y le ayudan a desarrollar el pensamiento crítico y reflexivo.

En este sentido, las humanidades cobran protagonismo y son el aliado perfecto para cualquier rama del saber.

Cuáles son las habilidades esenciales

Todas las personas tienen la capacidad de entrenar, integrar, desarrollar y consolidar sus habilidades. Cada ser humano es único, singular e irrepetible, por lo que cada uno tiene su estilo, su impronta y deja su huella personal.

De acuerdo con López-Casares, entre las habilidades específicas más relevantes se encuentran la capacidad de hablar en público con convicción, con dominio del tema y con influencia, o la capacidad empática, esencial para conectar con las audiencias, con los clientes y con los equipos, comprendiendo el estado emocional y teniendo en cuenta las condiciones que rodean a esos públicos.

Todas las personas tienen la capacidad de entrenar, integrar, desarrollar y consolidar sus habilidades. | Foto: Getty Images

También hay que tener una visión estratégica y desarrollar la amplitud de miras para crear proyecciones o escenarios futuros y tomar decisiones, o las habilidades que rodean a la creatividad, que son cruciales para que las organizaciones se encaminen hacia la innovación.

Así mismo, están el arte de hacer preguntas para cuestionar lo que rodea con otra mirada, la capacidad para realizar asociaciones y conexiones o el cambio de perspectivas para apreciar otros ángulos que antes pasaban desapercibidos.

Estas habilidades, según la experta, se potencian con asignaturas específicas en las que se trabajan la comunicación, la capacidad de liderazgo, la inteligencia emocional o la gestión de equipos, entre otros.