El cáncer de mama, de cuello uterino, colorrectal, de pulmón y de tiroides –que vienen en aumento– son los tipos de cáncer que se presentan con mayor frecuencia entre las colombianas, según el Ministerio de Salud. A pesar de que el país cuenta con un marco regulatorio y distintas tecnologías para una detección oportuna, las cifras siguen siendo elevadas.
Jaime Alberto González, secretario general de la Asociación Colombiana de Hematología y Oncología (Acho), señala que, en el caso del cáncer de seno, el panorama es preocupante. A pesar de tener un modelo de screening definido por el marco normativo y una ruta para el diagnóstico temprano, “seguimos teniendo cáncer de mama avanzado, el cual no tiene tasas de curación altas y genera costos en salud muy elevados”.
De acuerdo con el Observatorio Global del Cáncer (Globocan), del total de nuevos casos durante 2020 en Colombia, el 13,7 por ciento correspondió a cáncer de mama y el 8 por ciento de las mujeres diagnosticadas (4.411) fallecieron. En el caso del cáncer de cuello uterino, el panorama es menos alentador. Por ser una enfermedad que tiene una causa infecciosa como lo es el VPH (virus del papiloma humano), “debería ser una patología en plan de erradicación, ya que tiene vacuna preventiva”.
Sin embargo, según datos de Globocan, anualmente mueren más de 2.500 mujeres por esta causa. Solo en 2020 se presentaron casi 5.000 casos nuevos, de los cuales 2.490 fueron fatales. Asimismo, la Cuenta de Alto Costo reveló que durante el periodo comprendido entre el 2 de enero de 2020 y el 1 de enero de 2021 se registraron 2.050 pacientes nuevas de cáncer de cuello uterino y 1.591 muertes. Una cifra que podría ser mayor debido a la falta de exámenes de diagnóstico, como citologías, durantea pandemia.
En cambio, el cáncer de ovario tiene una menor incidencia, pero una mayor tasa de mortalidad. De acuerdo con la American Cancer Society, esta enfermedad les ocasiona la muerte a más del 50 por ciento de las mujeres diagnosticadas anualmente en todo el mundo, lo cual significa que es la quinta patología oncológica que más fallecimientos causa en este segmento poblacional.
Barreras para la atención
Catalina Rincón, directora ejecutiva del Observatorio de Cáncer de Adultos, asegura que ven con preocupación que las barreras para la atención integral del cáncer en las mujeres persisten en la prevención, diagnóstico temprano, inicio del tratamiento, continuidad en los tratamientos, acceso a cuidados paliativos y atención multidisciplinaria. De acuerdo con la encuesta de AllCan, las barreras de acceso afectan en mayor proporción a las pacientes de cáncer de cérvix (cuello uterino).
Fallas administrativas, falta de resolutividad, largos tiempos para los trámites en los niveles primarios, fragmentación del servicio, poca comunicación entre profesionales de la salud y la no interoperabilidad entre sistemas de información de las diferentes instituciones en las que recibe los servicios generan dificultades para que ellas accedan a las ayudas del sistema de salud.
Según Rincón, “está demostrado que el bajo nivel educativo impacta de manera negativa el conocimiento de las pacientes sobre cómo navegar en el sistema de salud, sus deberes y derechos, y la autogestión de su enfermedad y de los procesos administrativos”.
Para afrontar este complejo panorama, señalan los expertos, hay que garantizar la integralidad de la atención, realizar campañas preventivas para todos los tipos de cáncer, continuar fortaleciendo la inversión en atención y tecnologías, además de las capacitaciones al personal de la salud.