“Hay un problema grande en Colombia frente a la seguridad vial”, aseguró Lina María Huari, directora general (e) de la Agencia Nacional de Seguridad Vial. En los últimos años el país ha experimentado un incremento en el número de siniestros viales. Solamente el año pasado murieron 8.264 colombianos, de los cuales más de la mitad eran usuarios de motocicletas.
Ricardo Montezuma, urbanista y experto en movilidad, advirtió que esto se debe, entre otros factores, a la poca rigurosidad en los trámites para obtener la licencia de conducción y la falta de compromiso por parte de los conductores con el SOAT, muchos no lo tienen o lo cargan vencido.
Para reducir estas cifras, la tecnología se ha convertido en un aliado clave. Desde el sistema de detección de peatones hasta algo tan simple como un manos libres pueden salvar vidas, aseguró Huari durante el Foro Movilidad y Transporte, organizado por Foros Semana.
Las ventajas de la tecnología, sin embargo, no se quedan solo en la prevención de siniestros viales. También mejoran la vigilancia, permiten la identificación de los vehículos responsables de los accidentes y facilitan el control de la velocidad de los carros que circulan por las carreteras, mencionó Montezuma.
La industria automotriz también está comprometida con el uso de la tecnología para mejorar la movilidad y reducir la accidentalidad vial. Compañías como Toyota lideran iniciativas como la plataforma Kinto, que consiste en un servicio que brinda soluciones de movilidad.
La marca japonesa también se ha dedicado a investigar qué tecnología se adapta mejor al país. Los análisis concluyeron que la incorporación de vehículos híbridos al mercado nacional es la opción que más se adapta al bolsillo de los colombianos, además de contribuir a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).