Durante el panel ‘Hacia un futuro más sostenible’, representantes de las empresas y del sector público, afirmaron que Colombia se mueve rápidamente hacia la consolidación de modelos de movilidad y transporte sostenible en todo el territorio nacional, en particular, gracias a la electrificación de vehículos particulares y de uso masivo.
Para Marco Pastrana, gerente general de Motorysa, el país tiene avances en materia legislativa, ya que normativas como la Ley 1964 de 2019, que establece esquemas de promoción para el uso de vehículos eléctricos y de cero emisiones a través de incentivos en parqueaderos, impuestos y pico y placa; demuestran que “hemos avanzado en legislación frente a otros países latinoamericanos”.
Pastrana resaltó que la introducción de vehículos eléctricos se ha hecho a gran escala. De hecho, Bogotá fue una de las ciudades pioneras en implementar flotas de taxis eléctricos y actualmente cuenta con alrededor de 1.485 buses eléctricos en funcionamiento. Asimismo, aseguró que de los países de la región, Colombia lidera la venta de este tipo de vehículos.
Santiago Ángel, director de Relaciones de Gobierno, Comunicaciones y Responsabilidad Corporativa de General Motors, aseveró que “Colombia está en un selecto grupo, con Chile y Brasil, en el desarrollo de tecnologías limpias y de electrificación”, gracias a una matriz diversificada que en términos energéticos, permite el desarrollo de diferentes tecnologías.
Así mismo, John Jairo Contreras, vicepresidente de Grandes Clientes y Soluciones Energéticas de Vanti, señaló que “es muy positivo el camino que ha recorrido el país, porque hay una preocupación auténtica desde el punto de vista de la política pública para fomentar la movilidad sostenible”. De igual forma, destacó la labor del sector privado en la transición a combustibles sostenibles, que han propiciado que en Colombia circulen cerca de 2.000 tractocamiones con gas natural Euro 6.
Al respecto, Carolina Rojas Hayes, presidenta ejecutiva de Fedebiocombustibles, explicó que “los combustibles de origen vegetal como el biodiesel reducen las emisiones de gases de efecto invernadero en 83 por ciento y el bioetanol en 74 por ciento”. Asimismo, su uso va por buen camino. “El año pasado 17 millones de vehículos consumieron 394 millones de litros de bioetanol de los cuales 360 provenían de la caña de azúcar, y 600.000 vehículos entre tractores y camiones, consumieron 685.000 toneladas de biodiesel”.
Sin embargo, a pesar de los logros significativos, de acuerdo con Alimar Benítez, directora de Inteligencia para la Movilidad de la Secretaría Distrital de Movilidad, quedan retos pendientes de articulación con el Gobierno nacional, debido a que hay escasez de fuentes de financiación en infraestructura para las ciudades del país que quieren desarrollar estrategias de electrificación, por ejemplo, con la instalación de sistemas de carga que respondan a la demanda por el aumento de vehículos eléctricos.
Asimismo, Benítez mencionó que lo que se quiere, más allá de una migración a vehículos eléctricos, es que las personas usen modelos de transporte masivos y sostenibles. Este es un propósito que esperan desde ciudades como Bogotá se empiece a alcanzar. “Si uno va a una ciudad en otra parte del mundo con un medio de transporte masivo y eficiente, no pensaría en el uso de un taxi o vehículo particular”, aseguró.
Ángel finalizó resaltando que por medio de políticas de incentivos el país va a mantener su buen rendimiento hacia la movilidad sostenible: “la idea es que los que más contribuyen al aporte ambiental, sean los que más beneficios tengan y acerquemos al consumidor a tecnologías que hoy en día son más caras para Colombia”.