Uno de los factores clave que incide en la alta prevalencia de estas enfermedades es el estilo de vida poco saludable de una gran parte de la población. El sedentarismo, la mala alimentación, el consumo excesivo de alcohol y el tabaquismo aumentan el riesgo de desarrollar enfermedades del corazón. Además, la hipertensión y la diabetes, dos de los principales factores de riesgo cardiovascular, afectan a millones de personas en el país, lo que agrava el panorama.
Para examinar la situación actual de la salud cardiovascular en Colombia, conocer las cifras, los principales desafíos, avances y necesidades en la prevención, diagnóstico y tratamiento de enfermedades cardíacas, se desarrolló un panel en el que participaron los expertos: Luis Moya Jiménez, presidente de la Liga Colombiana contra el Infarto y la Hipertensión Arterial, Antonio Saltarín Bilbao, presidente del capítulo central de la Sociedad Colombiana de Cardiología y Cirugía Cardiovascular y Juan Carlos Díaz Martínez, presidente del Colegio Colombiano de Electrofisiología.
Luis Moya Jiménez, presidente de la Liga Colombiana contra el Infarto y la Hipertensión Arterial, alertó que la hipertensión arterial es el asesino silencioso, y que de 100 pacientes, solo 50 conocen que son hipertensos. “La cardiopatía isquémica viene aumentando porque la gente se alimenta mal, come muchas grasas. Seis personas pueden tener un infarto cada hora en Colombia y esto es alarmante”.
“En el mundo se dice que las muertes por cardiopatía isquémica han aumentado en los últimos dos años el 12 %. Hoy día se mueren 70.000 personas de infarto y en el 2021 eran 56.000. Esto es como una epidemia (...) Por eso, quienes presenten síntomas acudan rápidamente al médico”, agregó Moya.
Del mismo modo, señaló que entre 2021 y 2022, 17 millones de personas en el mundo murieron por esta causa y de acuerdo a la tendencia, se calcula que para el año 2030, esta cifra podría aumentar a 30 millones de personas fallecidas.
Frente a los retos que el país debe enfrentar para mejorar su atención en salud cardiovascular, el doctor Antonio Saltarín Bilbao, presidente del capítulo central de la Sociedad Colombiana de Cardiología y Cirugía Cardiovascular, apuntó que aunque en el país hay excelentes profesionales que aportan mucho en la parte de diagnóstico y tratamiento, el sistema de salud en el país aún enfrenta desafíos en cobertura, comenzando por la brecha entre regímenes, territorios y acceso a las zonas rurales.
Sin embargo, destacó el avance de la nación en traer medicamentos nuevos, en “el uso de tecnologías como la angiografía coronaria, que es un método para ver las venas sin hacer cateterismo cardiaco, la resonancia nuclear magnética cardiaca, la realización de procedimientos menos invasivos y el tratamiento de arritmias desde la electrofisiología”, precisó, Saltarín.
Sobre este mismo tema, Juan Carlos Díaz Martínez, presidente del Colegio Colombiano de Electrofisiología, resaltó la importancia de esta especialidad de la cardiología en arritmias, que puede ayudar a evitar los casos de muerte súbita en Colombia y el mundo. A pesar de ser un área no tan conocida, Díaz subrayó su importancia no solo en el deporte, sino en la cotidianidad. No obstante, advirtió que hay un déficit de profesionales de esta importante especialidad en el país.
“En la actualidad somos casi 100 electro-fisiólogos, de los cuales 83 de ellos son parte del colegio colombiano de electrofisiología en Colombia. Uno de los principales retos que tenemos en la actualidad es que se nos remitan los pacientes; necesitamos que más personas en Colombia conozcan que existe esta especialidad que les puede ayudar a tratar sus arritmias cardiacas y que tenemos la disponibilidad, la tecnología y el talento humano para atenderlos”, puntualizó.