“A Diego lo mataron”, declaró categórico a los periodistas el abogado Rodolfo Baqué, al aseverar que el campeón en el Mundial México 1986 era tratado por una afección cardiaca, pero a la vez recibía medicamentos psiquiátricos que le aceleraban el pulso.

Además, según el abogado, Maradona sufrió una caída y cuando la enfermera pidió hacerle una tomografía, uno de sus allegados lo descartó para evitar los comentarios de la prensa.

La enfermera, que estaba de guardia el día en que murió Maradona, acudió este miércoles ante la fiscalía de San Isidro, a las afueras de Buenos Aires, por ser sospechosa de homicidio junto a otros seis miembros del equipo médico que atendía al exfutbolista.

Madrid, al igual que el resto del equipo médico que cuidaba a Maradona, es investigada bajo el cargo de “homicidio simple con dolo eventual”, un delito con una pena de 8 a 25 años de cárcel.

La fiscalía entiende que Maradona recibió una atención “deficitaria” por parte de los integrantes del equipo médico que, aunque sabían que podía morir, no hicieron nada para evitarlo.

Madrid era la enfermera de Maradona durante el día. El enfermero que lo cuidaba de noche, Ricardo Almirón, abrió la ronda de declaraciones indagatorias el lunes y reveló anomalías, al asegurar que nunca había sido notificado de que el paciente padecía cardiopatías.

Maradona falleció el 25 de noviembre de 2020 debido a una crisis cardiorrespiratoria mientras estaba solo en cama en una casa del barrio San Andrés, al norte de Buenos Aires, donde se recuperaba de una cirugía de la cabeza por un hematoma subdural.

“Hay una responsabilidad de los médicos tratantes (...) En el fondo hubo muchas alertas de que Maradona, un día antes o un día después, iba a fallecer. Y ninguno de los médicos hizo algo para evitarlo”, aseveró Baqué en una pausa de la audiencia de declaración indagatoria de Madrid, que se extendió por más de ocho horas.

“Lo que hizo Madrid fue cumplir las indicaciones de los médicos tratantes”, dijo el abogado a la prensa. “Era conocido por todo el entorno de Maradona que ella no podía tener trato con él porque la había echado, como así también echó a los acompañantes terapéuticos”, aseveró Baqué.

Así fue homenajeado el ídolo en la reciente inaugaración de la Copa América, en Brasil. | Foto: Pantallazo Copa América

El abogado adelantó que pedirá el sobreseimiento de su defendida esta semana.

Madrid fue una de las personas que halló a Maradona sin signos vitales e intentó reanimarlo, según explicó en su primera declaración como testigo.

En aquella oportunidad había dicho que no realizó los controles de rutina al iniciar su turno para dejar descansar al paciente.

Luego trascendió un reporte escrito a sus superiores donde asentó haber intentado controlarlo, pero que Maradona se había negado.

Madrid admitió en una segunda declaración que ese informe era falso y que fue su superior quien le pidió hacerlo.

El enfermero Almirón declaró el lunes que también tenía orden de no despertar a Maradona, y que respiraba con normalidad cuando le pasó la guardia a Madrid, unas horas antes de que fuera hallado sin vida en la cama.

La junta médica de 20 peritos determinó que Maradona agonizó durante horas y “fue abandonado a su suerte”, al tiempo que estimó que el equipo médico que encabezaba el neurocirujano Leopoldo Luque aplicó un tratamiento “inadecuado, deficiente y temerario”.

Además de los dos enfermeros, deben rendir declaración Luque y los otros integrantes del equipo médico, en audiencias previstas hasta el 28 de junio.

Tras las declaraciones, la fiscalía pasará la causa al juez con la recomendación de procesarlos o sobreseerlos. Finalmente, después de un proceso que puede llevar muchos meses y hasta años, el caso puede llegar a juicio oral.