La creadora de contenido Aida Victoria Merlano no ha dejado de ser noticia en los últimos meses desde que se supo que estaba enfrentando un proceso legal; con su manera de expresarse, además de su belleza, ha logrado ganarse el interés de muchos.
Incluso, el pasado 13 de septiembre, la joven influencer fue condenada a siete años y cinco meses de prisión, por su participación en la fuga de su madre, la excongresista Aida Merlano, registrada el primero de octubre de 2019.
La decisión la tomó el juzgado al considerar que la pena y los delitos, según varios fallos de la Corte Suprema de Justicia, no justifican una medida privativa de la libertad en centro carcelario. Por su arraigo y falta de antecedentes judiciales le hacen merecedora a cumplir su condena desde su domicilio en el barrio Golf, en Barranquilla. Esto tras la firma de un compromiso de buen comportamiento y el pago de una multa.
Pues bien, recientemente la creadora de contenido fue vista en dos aeropuertos del país. primero fue captada en el aeropuerto internacional José María Córdova de Rionegro, alrededor de las 3:00 p. m., para abordar un avión rumbo al aeropuerto internacional El Dorado, en Bogotá.
Luego de unas horas, Merlano habría pasado por Migración Colombia para viajar rumbo a Buenos Aires, en Argentina, según lo dio a conocer El Colombiano.
Ante esta noticia, muchos usuarios en las redes sociales se cuestionan: ¿si Aida Merlano está condenada cómo es que puede irse del país? Resulta que la generadora de contenidos “puede seguir con su vida normalmente, incluidos los viajes”, se lee en un apartado del medio citado, pues solo hasta que se conozca el fallo definitivo en su proceso puede seguir en libertad, debido a la apelación que ella hizo ante la decisión del juez.
Así fue el plan de fuga de su madre
Sobre las diez de la mañana llegaron los hermanos Merlano al consultorio ubicado en el norte de Bogotá. El entonces menor de edad Esteban José Manzaneda vestía jean, camiseta blanca, buzo negro, tenis y gorra blancos; además, cargaba un morral negro. Esta maleta es la clave de la fuga. Nunca se la quitó de la espalda, de acuerdo con los registros fílmicos; lucía nervioso, se comía las uñas y estaba inquieto. Con el morral entró al baño. Era parte del plan.
Mientras tanto, su hermana Aída había pedido unas hamburguesas que llegaron en bolsas, las repartieron y la excongresista Aida Merlano tomó una en las manos y se dirigió al mismo baño al que momentos antes había entrado su hijo menor de edad. La vuelta estaba hecha.
La bolsa desocupada con la que entró la hoy prófuga ya no lucía vacía, por el contrario, tenía varios elementos adentro. ¿De qué se trataba? La conclusión es clara: su hijo llevaba en la maleta la cuerda roja, los guantes, la ropa y hasta una peluca que dejó en el lugar, a la espera de que su mamá los recogiera, como efectivamente lo hizo.
Mientras tanto, Esteban, el menor que no era tampoco un niño, pues estaba a un mes de cumplir la mayoría de edad, se quedó afuera del consultorio para distraer a la guardia del Inpec.
En el consultorio, el plan avanzaba según lo acordado. Faltando diez minutos para las cuatro de la tarde, Aida Victoria usó su celular y su mamá, como si fuera un asunto normal, se cambió la ropa y puso la mentada maleta cerca de la ventana.
De ahí sacó la cuerda que la conduciría a la libertad. Su hija le señaló un lugar donde podía amarrarla y una caneca para ocultarla mientras hacían el movimiento. Todo pasaba al frente de los ojos de la influencer Aida Victoria; incluso delante de ella se puso los guantes y luego le entregó un celular a su mamá.
Hubo un momento en el que estaban los tres Merlano en el consultorio con el odontólogo Javier Guillermo Cely. Los hijos de la congresista prófuga se despidieron, tomaron algunos elementos y salieron un momento acompañados de Cely.
Fue en ese momento en que Aida Merlano Rebolledo se lanzó por la ventana y emprendió la huida en la moto que la esperaba a la salida del parqueadero del edificio. Sin embargo, es claro para el juez que la coordinación y la fuga no se podía dar sin que alguien avisara al motorizado.
¿Quién lo hizo? Su hija, la influencer, era la única que usaba un celular en el lugar y dio las señas. También le entregó un teléfono a su mamá.
El lío no para ahí, tal como reveló SEMANA, Aída Victoria está lista para ser imputada por el delito de lavado de activos. Literalmente, un problema de once varas.