En la noche del 14 de septiembre, se llevó a cabo en el hotel Grand Hyatt de Bogotá, la subasta anual de arte de la Fundación A la Rueda Rueda, que por noveno año ofreció a coleccionistas y compradores la oportunidad de adquirir las obras de varios de los maestros más destacados del arte local y mundial.
Dicha subasta de beneficencia es considerada como la más importante de Colombia en su clase y una de las mejores de Latinoamérica por la calidad de las obras de arte que ofrece al público asistente al evento.
“La Subasta es una oportunidad que tiene Colombia para demostrar que es rica en talento, creatividad y solidaridad, que es una nación llena de afecto por sus compatriotas que viven en condiciones de vulnerabilidad y resume nuestro deseo de apoyar el arte, invertir socialmente y tener la posibilidad de realizar importantes proyectos en el país” , aseguró Vivi Barguil, directora de la Fundación.
La fundación sigue apoyando las causas sociales que la han caracterizado durante su tiempo de funcionamiento y los fondos derivados de la subasta van dirigidos a niños vulnerables de la región Caribe colombiana. El principal eje de A la Rueda Rueda es que los menores puedan potenciar sus habilidades a través de la creatividad.
Es por eso, que en inmediaciones de la fundación en la ciudad de Montería, Córdoba hay programas de música, pintura, danza, boxeo, deportes y ajedrez, con el que ofrecen a jóvenes de la zona un espacio concreto y seguro para que pueda desarrollar dichas habilidades durante su tiempo libre.
“Necesitábamos tener una gala importante para la fundación para poder recoger para tener recursos para nuestros niños y nuestros programas, pero además para darle un realce a los artistas colombianos y darle oportunidades a todos esos artistas jóvenes emergentes que hoy en día están tomando mucha importancia tanto en el país como por fuera”, agrega Vivi Barguil acerca del por qué se creó dicha subasta hace nueve años. Al evento, asistió con su esposo, el presidente del Grupo Aval, Luis Carlos Sarmiento Gútierrez.
María Victoria Estada, directora de la subasta dice que sin dicho evento, no se podría seguir realizando los programas para los niños vulnerables. “Es un programa que acoge a los niños cuando no están en las escuelas, entonces hace que los niños no estén en las calles, además desde la primera versión, en la subasta tenemos obras en la subasta pintadas por los niños de la fundación y siempre tiene han tenido un gran éxito”.
Así mismo, la directora de ARTBO, María Paz Gaviria hizo un llamado a un llamado a fortalecer estas causas. “Hay que apoyar de alguna manera a las fundaciones que despierten el corazón de cada una de las personas y que en todo caso estos aportes siempre son aportes a nuestra sociedad y al bien colectivo. Además, no quiero dejar de lado también esa importancia no solo de apoyar las fundaciones, sino de apoyar la creación artística”, dijo a SEMANA.
Finalmente, la subasta logró vender todas las obras que se ofrecieron en el evento, algo que ha ocurrido durante todas las entregas de dicho evento. Según los asistentes, hubo obras que fueron muy disputadas entre los asistentes que querían hacerse con ellas. Ahora, los organizadores aseguran que, desde ya, empiezan a planear la entrega del siguiente año.