La fiesta anual del Instituto del Vestido del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, conocida como los Óscar de la moda, se celebra tradicionalmente el primer lunes de mayo, pero este año tuvo que se aplazada para el 13 de septiembre, debido a las restricciones impuestas por la crisis del coronavirus.
La velada, cuyo fin es recaudar fondos para el instituto, vuelve con su gran atractivo, que son las grandes estrellas y top models vestidas por los modistos más prestigiosos.
Los salones del gran museo neoyorquino suelen llenarse esa noche de invitados, en su mayoría celebridades, cuidadosamente escogidos por Anna Wintour, la poderosa editora jefe de Vogue, pero esta vez habrá limitaciones, dado que la pandemia aún no ha terminado.
Un vocero del evento le comentó al Daily Beat que la gala tendrá un carácter algo más íntimo, pues es necesario reducir la concurrencia.
De otro lado, el portavoz contó que a los asistentes se les exigirá constancia de que están vacunados contra la covid-19 y deberán usar tapabocas en los interiores, excepto para comer y beber.
En cuanto a la lista de convidados, la verdad es que esta no se da a conocer con anterioridad, pero ya se han filtrado algunos nombres. Según el New York Post, la cantante Rihanna, favorita de Wintour, retornará con un atuendo que seguro dará mucho de qué hablar, como ya sucedió en 2015 con su célebre modelo de Guo Pei, una ampulosa creación amarilla, acorde con el tema de la fiesta ese año, que fue la influencia de China en la moda.
Otra que se hará presente es la actriz Lupita Nyong’o, ganadora del Óscar, reina de la alfombra roja y quien también ha adornado las portadas de Vogue varias veces.
Sin embargo, la invitada que más expectativa está causando desde ya es Jennifer López. Rara vez ella se pierde la fiesta desde 2004, pero esta vez la intriga no solo corre por cuenta del vestido con que engalanará su sinuosa silueta, pues sus elecciones siempre son impactantes. El gran interes es si asistirá del brazo del actor Ben Affleck, con quien acaba de retomar la publicitada relación que rompieron a comienzos del siglo, cuando estuvieron a punto de casarse. Poco a poco, la pareja ha ido dando muestras de su regreso, pero su aparición en un evento como la gala del MET sería como su nueva presentación oficial en sociedad.
Otras divas que concurrirán, también según el Post, son la modelo Emily Ratajkowski y la cantante Camila Cabello.
A pesar de que no será tan grande como siempre, la velada no perderá esas ínfulas que han hecho de ella uno de los máximos sucesos sociales de la Gran Manzana, además de un derroche de dinero.
Cómo siempre, solo se podrá asistir con invitación, pero todos los invitados tendrán que pagar la entrada, cuyos costos ascienden a 30.000 dólares por persona y 275.000 dólares por mesa. A estas alturas todas las localidades están vendidas.
Además de la colecta de recursos, el fin de la gala también es inaugurar la exposición anual del Instituto del Vestido, la cual define el tema de la fiesta. Hasta ahora, solo se sabe que el motivo de este año será muy “american”, es decir basado en la cultura estadounidense, pero no se saben mayores detalles.
Lo que si se conoce es que la joven poetisa Amanda Gorman, catapultada a la fama luego de su aparición en la posesión de Joe Biden, y el diseñador Tom Ford oficiarán como anfitriones principales de la noche, en lo cual serán apoyados por el actor Timothée Chalamet. También es costumbre de la fiesta tener una mesa de presidentes, que este año será conformada por la cantante Billie Eilish y la tenista Naomi Osaka.