Luego de la expulsión de Marlon en el capítulo 38 del Desafío XX, Beta ha pasado por varios momentos de altas y bajas en los que, definitivamente, no han logrado llenar ese gran vacío que dejó su compañero como líder.
Si bien es cierto que recientemente estaban celebrando el aumento de sus ganancias en el reality, luego de romper su alianza con Omega y descontarles el 50 % del dinero que tenían bajo su poder como castigo, el equipo rosado aprovechó una de sus últimas victorias para vengarse y hacerles pagar el arriendo de 20 millones de pesos.
Esta decisión hizo que así como recibieron este dinero de manera repentina, también lo perdieran más rápido de lo que esperaban, por lo que hubo un evidente bajonazo de ánimo entre sus integrantes, que más allá de permanecer unidos, han protagonizado algunas discusiones.
Debido a esto, en una conversación que Darlyn sostuvo con Glock y Valentina, confesó que le encantaría que los hombres de su equipo tuvieran más “perrenque” para mejorar el ambiente y salir adelante en las pruebas. “Los veo como dormidos, pero bueno... Nos tenemos nosotras, tenemos que aguantar, resistir”, dijo.
Enseguida, Glock aseguró que estaba de acuerdo con su opinión, ya que considera que ninguno es líder, pese a que todos tienen muchas habilidades, pero no tienen esa voz de aliento que tanto necesitan en los momentos difíciles, como trata de hacerlo Valentina.
Además, reconoció que aunque Arandú mejoró físicamente, Marlon sigue haciendo falta en el equipo justamente por su energía y voz de líder, cualidades con las que siempre los ayudó a mantenerse de pie en la competencia hasta que fue expulsado.
Y es que la crisis que atraviesa Beta en esta etapa del reality se hizo aún más evidente cuando ocuparon el segundo lugar en el Desafío de Sentencia y Bienestar que enfrentaron en el capítulo 48 del programa de Caracol Televisión, debido a que en lugar de destacar el esfuerzo que hizo Valentina en la pista, teniendo en cuenta que se sentía mal y tenía vértigo por un vino que le hizo daño la noche anterior, Arandú se mostró bastante molesto.
“No puede escuchar un consejo, es como ir con una bebé, hay que decirle todo lo que tiene que hacer”, dijo el participante, a lo que su compañera reaccionó de inmediato mencionando que no le gusta que la grite, pero él señaló que era un gesto de transparencia.
Sin embargo, Valentina afirmó que era impulsivo, pero él siguió defendiendo su postura enojado, motivo por el que las demás integrantes del equipo le pidieron bajar el tono que estaba utilizando para dirigirse a su compañera.
Minutos después, Darlyn y Valentina se sentaron lejos de los demás y comentaron que Arandú no tiene la comunicación asertiva que se requiere para liderar el equipo.
“No es una persona que proteja, es brusco hablando y esta capitanía se la ganó solo porque sí. No es solo que sea bueno y habilidoso, debe ayudarme en la convivencia, pero la empeora”, expresó la atleta crossfit de 22 años.
Al final de su conversación, con Valentina llegaron a la conclusión de que ningún hombre en Beta es un verdadero Capitán y, por ende, ellas son las que han logrado mantener todo en calma. “Donde no lo hiciéramos, seríamos otro Gamma”, agregó Darlyn.