El Chavo del 8 se convirtió en uno de los programas más famosos de la televisión internacional, debido al auge que tomó entre el público. El proyecto creador por Roberto Gómez Bolaños, Chespirito, causó sensación en millones de personas, quienes aún disfrutan de videos y fragmentos de los capítulos.
Uno de los personajes que conquistó el corazón de los espectadores fue Quico, el hijo de Doña Florinda, la cual era interpretada por Florinda Meza. El papel del niño consentido y travieso fue encarnado por Carlos Villagrán, uno de los miembros del elenco original, quien se robó las miradas con sus expresiones, sus chistes y sus maldades al protagonista.
A lo largo de los años cautivó con su forma de hablar, su particular traje de marinero y las grandes pelotas de colores con las que jugaba en la vecindad. El personaje fue creciendo considerablemente, por lo que se ubicó como uno de los más icónicos de la televisión mexicana.
Sin embargo, recientemente, Carlos Villagrán habría dado una lamentable noticia con respecto a su futuro artístico, dejando la puerta abierta para un posible retiro de los escenarios. Según medios internacionales, el actor se despediría de Quico y cerraría esta etapa de su vida.
De acuerdo con lo revelado por el medio mexicano El Universal, el actor ya estaría preparado para decirle adiós al personaje con la actual gira que lleva a cabo por Estados Unidos. El diario latino indicó que Phoenix sería la última fecha en la que Quico llegaría al escenario a bailar, lanzar chistes e interpretar las recordadas canciones que surgieron en el pasado.
El medio recopiló las declaraciones que habría dado Villagrán en una rueda de prensa, señalando que su historia con ‘Kiko’, como lo renombró tras salir de El Chavo del 8, hacía parte de una vida entera, ya que a sus 78 años dedicó gran parte de la carrera a darle vida a este personaje.
“Será el mismo ‘Kiko’ que no sabe hacer nada, yo no puedo hacer otra cosa que no sea ‘Kiko’, porque sería fraude para la gente”, dijo, a lo que agregó agradecimientos para la gente que lo apoyó siempre: “Me han dado de comer, y más importante, le han dado de comer a mis hijos”.
No obstante, según reseña El Tiempo, Carlos Villagrán tomaría esta decisión por su edad y por el respeto que le tiene a la gente, ya que era consciente de que su etapa estaba cerca de terminar.
“Por mi edad, por respeto a mí, por respeto a la gente, por respeto a todo el mundo. Tengo la edad para retirarme”, indicó el medio.
De igual forma, Telemundo entrevistó al actor, quien comentó que esta gira era el adiós a su experiencia como ‘Kiko’, ya que quería darse nuevas oportunidades y abrirse paso a otras anécdotas.
“Es la gira del adiós por la edad que tengo, y para tener la oportunidad también de poder valerme por mí mismo para ir a Europa, no la conozco y quisiera hacer un viajecito por allá con mi señora”, dijo.
La última y misteriosa escena que grabó Ramón Valdés, ¿presagio de su muerte?
Luego de abandonar el proyecto creado por su amigo Chespirito, Ramón Valdés hizo parte del programa ¡Ah, qué Kiko!, donde compartió con su compañero Carlos Villagrán. Los dos retomaron sus personajes de El Chavo del 8, dándole una nueva trama a la unión entre el niño consentido y el deudor que buscaba trabajo para reunir dinero.
En esta ocasión, Don Ramón era el vendedor de una tienda de abarrotes y contaba con la ayuda de Kiko, quien ocasionaba toda clase de problemas y desdichas. La química entre los papeles se hizo evidente, despertando otra clase de humor y chistes que recordaban los pellizcos y travesuras que se hacían en la Vecindad.
Sin embargo, en su paso por esta idea, muchos se preguntaron cuál fue la última escena que desarrolló Valdés, teniendo en cuenta que ya le había sido diagnosticado el fuerte cáncer en su cuerpo.
De acuerdo con lo que reveló el propio Villagrán a los medios internacionales en aquel momento, la escena que rodó su colega fue una en la que particularmente estaba en un cementerio, con poca luz y una neblina que inundaba el fondo. El personaje camina hacia una reja y observa detenidamente lo que ocurre en aquel lugar, mientras luce una capa y un sombrero.
Al abrir la reja, el artista se pierde entre la niebla y desaparece por completo, por lo que muchos seguidores y fanáticos aseguran que era una premonición de su muerte. Es importante recordar que el mexicano grabó esta secuencia semanas antes de perder la vida por los daños que sufrió su cuerpo.
Villagrán, que fue clave en las grabaciones de El Chavo del 8 por muchos años, reveló en diferentes testimonios que durante las fechas en las que se rodaron estos capítulos, su amigo se veía más cansado, agotado y débil, por lo que tenían que detener las extensas jornadas de grabaciones.