En la vida de los famosos no todo es color rosa, como algunos podrían imaginar. Más allá de la proyección de sus carreras o que figuren ante las cámaras de televisión, pueden sufrir y tener percances como cualquiera. Muestra de ello es Catalina Gómez, una de las presentadoras más queridas por la audiencia colombiana, que a través de sus redes sociales comparte su vida tras la fama.
Catalina, que suma 16 años presentando el magacín televisivo Día a Día, compartió un difícil testimonio de su maternidad a través de su cuenta en Instagram. Y las redes sociales que se dedican al monitoreo de los famosos hicieron eco de su narración. Tal es el caso del portal lacriollacolombiana, con más de 90.000 seguidores.
En el video, la comunicadora social egresada de la Pontificia Universidad Bolivariana dejó en evidencia que es una mortal más, que llora, en especial cuando lo que está en juego la maternidad. Lo hizo narrando lo complicado que fue para ella el embarazo de su hijo menor, Cristóbal. La mayor es Emilia y le lleva de diferencia siete años.
“Cuando quedé en embarazo de Emilia fue un proceso normal, tranquilo, fácil. Pero cuando quedé en embarazo de Cristóbal, empezaron las dificultades porque pasaba y pasaba el tiempo y no lo lograba”, contó Catalina en la primera parte del video.
La imposibilidad de quedar en embarazo en un comienzo no fue lo más delicado, “sino que tuve varias pérdidas y fueron momentos muy dolorosos”. Como si no hubiera obstáculos para dejar de creer, fue diagnosticada con ovario poliquístico, lo que hizo todavía más difícil la tarea de traer un nuevo hijo al mundo, el que acompañaría a Emilia en los juegos que tan felices hacen a los niños. “Decidí que, bueno, ya ni modo”, confesó que pensó.
La vida, sin embargo, es imprevisibilidad absoluta y cuando creyó que ya no tenía sentido insistir en tener un hijo más Dios, el de arriba, en el que algunos creen, le envió un regalo.
“De pronto me quedé embarazada, la alegría... se podrán imaginar. Hasta que un examen, en una ecografía casi al tercer mes y en un tamizaje me dijeron que venía con problemas, que venía con un problema genético, un problema del corazón, y que las probabilidades de que viniera bien eran muy pequeñas”, expresó Catalina, visiblemente conmovida.
Pero lo mejor fue el final de la historia, Cristóbal nació en buen estado de salud y, como ella mencionó, “aquí está, es un milagrito”.
Hoy, Emilia tiene 12 años de edad, mientras que Cristóbal tiene 7, y junto con su esposo, Juan Esteban Sampedro, integran una de las familias que más inspira a los colombianos.
Las pérdidas que tuvo
Acerca de las pérdidas que tuvo en el proceso de quedar embarazada, Catalina habló años atrás en conversación con la revista de entretenimiento TVyNovelas. El primero, en especial, fue el que más lágrimas le costó. Los demás, por supuesto, pero en compañía de su familia y sus seres queridos salió adelante de la situación.
“Fueron tres pérdidas. La primera me dio muy duro porque tenía mucha ilusión. Después con una amiga hicimos un trabajo para entender qué pasó, pero con los otros dos no quise pensar tanto, ni comprarles nada, ni hablar mucho de tema. Estuve más contenida, hasta que finalmente llegó Cristóbal”, dijo en ese entonces.
Y agregó: “Cuando llegó Cristóbal tuvimos mucho susto porque nos dijeron que nacería con problemas. Algunos exámenes no salieron bien y tuvimos la angustia de que pudiera tener problemas muy graves. Fue un embarazo fuerte, difícil, sufrido. Por eso solo conté lo del embarazo cuando tuve seis meses de gestación”.