Actualmente, Catalina Gómez se posiciona como una de las presentadoras favoritas de la televisión colombiana, gracias a su larga trayectoria en los medios de comunicación, especialmente en el mundo del entretenimiento.
Frente a las cámaras, la antioqueña se ha destacado por su talento, belleza y carisma, cualidades que han sido claves para crear una conexión especial con la audiencia, siendo también una de las personalidades más influyentes e icónicas de la farándula.
Su participación en Día a día de Caracol Televisión inició desde 2006, luego de adelantar sus estudios en comunicación social y periodismo en la Universidad Pontificia Bolivariana, llegando a coincidir con su actual esposo Juan Esteban Sampedro, padre de sus dos hijos Emilia y Cristóbal.
Sin embargo, aunque millones de espectadores han sido testigos de su labor en el matutino, muchos desconocen que Gómez tiene otras pasiones que practica a diario y que, recientemente, decidió aplicar en el set de grabación del programa, al parecer, para ayudar a su equipo a romper la rutina mientras obtienen algunos beneficios.
Además, con esta dinámica demostró que las pantallas no mienten, ya que la buena relación que tiene con sus colegas Catalina Gómez, Carolina Cruz, Carolina Soto, Iván Lalinde, Juan Diego Vanegas y Carlos Calero en el matutino, trasciende de las cámaras a la vida real, compartiendo varios momentos agradables.
Por esta razón, durante una de las más recientes emisiones de Día a día, fue registrada una sorpresiva faceta de la paisa detrás de cámaras que pocos conocían, pero que probablemente es muy solicitada entre sus compañeros.
En las imágenes que se alcanzaron a ver detrás de cámaras, se evidenció que Catalina Gómez se tomó un espacio para compartir con sus colegas y amigos una clase de meditación en la que ella era la guía.
De este modo, la antioqueña dejó de lado su rol de presentadora para desempeñar el papel de “maestra” o “guía” de meditación, mientras sus compañeros escuchaban y seguían atentos sus indicaciones.
La sesión de relajación de Catalina, también incluyó el uso de aceites corporales de su amigo y colega, Iván Lalinde, quien después de años de trabajo como presentador, se arriesgó a probar suerte en el mundo del emprendimiento y ahora le apuesta a un ‘negociazo’ fuera de la televisión.
Cabe mencionar que esta dinámica que llevó a cabo Catalina Gómez en el detrás de cámaras de Día a Día, también hace parte de los estudios que ha realizado a lo largo de su carrera, debido a que además de ser comunicadora social, también se graduó como Coach de bienestar y salud, por lo que se animó a compartir sus conocimientos con sus compañeros del programa.