Catalina Gómez se ha convertido en uno de los rostros más representativos del programa matutino Día a día, transmitido por Caracol Televisión. Su presencia en este espacio, que cuenta con más de 20 años de trayectoria, ha sido clave para consolidar el éxito del formato. La presentadora antioqueña conquistó a la audiencia con sus intervenciones, en las que compartía consejos prácticos y recomendaciones sobre temas relacionados con el estilo de vida.
Con más de una década vinculada al programa, la famosa dejó una marca imborrable gracias a su carisma y cercanía con los televidentes. Su capacidad para conectarse con el público la ha posicionado como una figura influyente en el ámbito del entretenimiento matutino.
Su participación activa en el desarrollo del contenido, junto con su calidez en la pantalla, la han hecho destacar, al punto de que tanto sus apariciones como sus ausencias generan interés y conversación entre los espectadores. Varios seguidores de Catalina Gómez suelen interesarse en detalles de su privacidad, la cual es compleja de conocer, pues no da muchas entrevistas.
Recientemente, la comunicadora desató reacciones en redes sociales tras una entrevista con Laura Acuña para el espacio digital La sala de Laura Acuña. Aunque no suele brindar este tipo de encuentros, en esta ocasión decidió abrirse y compartir una experiencia personal que vivió durante su búsqueda por convertirse en madre.
Su sinceridad durante la entrevista tocó el corazón de sus seguidores, generando diversas opiniones y dejando entrever una faceta más íntima de la presentadora, quien continúa siendo una de las figuras más queridas por el público colombiano.
En la charla, Catalina Gómez afirmó que tuvo un matrimonio antes de la relación con Juan Esteban Sampedro, navegando un poco en esta experiencia que lidió cuando solo tenía 18 años. A pesar de que la unión era bonita y no generó ningún conflicto, las condiciones no ayudaron y todo terminó.
“Esa relación, de casada, duró un año larguito. Fue una relación muy bonita, de la que no tengo sino cariño, gratitud y amor. Crecí mucho. De verdad fue muy bonito, porque como que crecimos juntos. yo tenía casi 18 años y él veintialgo, fue mi novio durante la universidad y cuando empecé a trabajar. Crecimos de la mano, siete años de novios, era lo que seguía...era muy chiquita. Finalmente amor había, cariño había, pero pues tal vez no nos dimos cuenta que no era para vivir el resto de la vida juntos”, dijo.
Cuando entró en detalles, Catalina Gómez, que salió del país con su esposo por unas vacaciones, puntualizó en las dinámicas que le tocó adoptar para sostener esta relación.
“Nos casamos y, efectivamente, yo ya estaba viviendo en Bogotá y complicaba las cosas. Él seguía allá, yo estaba aquí de lunes a jueves y en Medellín de jueves a domingo. Pero bueno, como te digo, fue demasiado chévere mientras duró, lo que pasó; no me arrepiento de absolutamente de nada y siempre estará en mi corazón lo mejor de esa relación”, afirmó.
En cuanto a sus papás, la paisa señaló que la apoyaron y respaldaron, ya que no eran progenitores que se metieran en sus decisiones personales.
“A mí papá le dio durito, cada historia es distinta y ellos nunca se metieron en mi vida, en mis decisiones y cosas. Mi mamá todo lo aconsejaba con amor, fue muy tranquilo. Ella me decía: ‘Lo importante es que estés bien’”, concluyó sobre el tema, dejando claridad en la forma en la que la acompañaron sus padres.