Madonna sabe muy bien cuál es su posición dentro de la industria musical y aprovecha cualquier ocasión para demostrarlo, como esta edición de Halloween, en la que hizo gala de su apodo, “la reina del pop”, y personificó a una de las reinas más importantes en la historia de la realeza británica.
La cantante no escatimó en ningún detalle y logró personificar a la perfección a la reina Isabel I de Inglaterra, más conocida como “la reina virgen”, con un vestido al estilo “isabelino” con un cuello en boleros, que obviamente iba a dejar un tramo destapado para que la intérprete de Hung Up dejara ver su escote y parte de sus atributos físicos.
Madonna también se puso una corona en cruz que rememoró su épica aparición en la MET Gala 2019 y usó el maquillaje característico de Isabel I, con una base blanca muy marcada que hace contraste con sus labios rojos y su cabello naranja.
La matriarca Ciccone no se disfrazó sola, lo hizo en compañía de sus hijos menores David, Stelle y Esther. El joven Banda personificó al villano de la película de Disney La princesa y el sapo, el Dr. Facilier, con su traje sastre muy al estilo años 20 con cola de pingüino y sombrero de copa con una calavera al frente.
Por su parte, Stelle eligió personificar a la malvada Maléfica, en el look que llevó Angelina Jolie en las películas de este personaje hechas por Disney, y Esther optó por personificar a una princesa asiática usando los tradicionales anillos de la tribu Karenni, famosa por sus “mujeres cuello de jirafa”.
Madonna y sus tres hijos salieron a las calles de Nueva York a mostrar sus disfraces y pedir dulces, para finalizar en una fiesta épica digna de una reina (que en esta ocasión valía por dos).
En las historias de Instagram se puede ver más detalladamente todos los disfraces de la familia, que a pesar de lo histriónico y polémico que pueda llegar a ser un disfraz donde Madonna muestra su zona íntima, es una muestra del cariño que la cantante siente por su familia, a la que trata de reunir cada vez que puede.
Madonna y su libertad sexual
Aun así, Madonna no deja de generar revuelo con sus atuendos y sus decisiones sobre su cuerpo, pues días atrás Madonna revolucionó las redes sociales con un topless que dejó boquiabiertos a sus seguidores, pues a sus 64 años sigue disfrutando de su cuerpo sin reparo de nada.
Madonna compartió una nueva colección de selfis en ‘topless’ en sus historias de Instagram el viernes 28 de octubre en la noche, manteniendo el flashback a su era original de “S.e.x.”, mientras posaba con un corsé blanco bajo el pecho y con emojis de piruletas y bolsas de dinero cubriendo sus pezones.
Una segunda foto, ya eliminada, mostraba a la estrella del pop con el mismo atuendo, inclinada hacia delante y con un texto superpuesto que decía Went from candy to money (“Pasamos de los caramelos al dinero”) censurando a sus Material Girls, según TMZ. Una tercera foto captó su torso vestido con un corsé de cuero negro con un emoji de caramelo sobre ella.
Pero esta no ha sido la única vez que Madonna se ha mostrado como Dios la trajo al mundo. De hecho, Madonna está rememorando uno de los capítulos más escandalosos de su carrera, cuando lanzó su libro sobre sexo “S.e.x.”, una compilación de imágenes y fotografías con contenido erótico, sexual y sadomasoquista, donde la cantante quería expresar la libertad sexual de las mujeres y la sociedad, posando ella misma ante el lente del legendario Steven Meisel, y bajo la coordinación del director artístico Fabien Baron.