Durante el sepelio del cantante Darío Gómez, este sábado en horas de la tarde su familia le dio unas últimas palabras al ‘Rey del Despecho’ en la capilla iglesia Santa Gema de Medellín, a la que solo tuvieron acceso los familiares del difunto.
Allí se pudieron escuchar palabras de gratitud de algunos de sus más allegados, que con la voz quebrada expresaron a los asistentes cuánto amaban a Darío y cuánto habrán de extrañarlo, por sus risas, abrazos y hasta su mirada.
Valentina Gómez, una de las nietas del cantante, tuvo oportunidad de hablar en la iglesia diciendo: “Abuelo, ¿por dónde empezar? No tengo palabras para expresar muy bien lo que siento, puede que en este momento trate de buscar la palabra perfecta para agradecerte a ti cuánto hiciste por tu familia, por tus amigos, tus fans”.
“Fuiste esa persona a la que yo sabía que le podía contar todo, que nunca jamás me iba a juzgar, que nunca me iba a dejar solita, sé que en este momento no puedo escuchar un consejo, una risa, o no puedo verte cantando en el carro, no pueda verte haciendo chistes y siendo así de charrito y burlón, diciendo groserías porque no te funcionaba algo, cantándole a los cachorros”, agregó la joven con voz triste.
“Tantas cosas que viví contigo y ahora solo quedan recuerdos en mi corazón. Tuve la fortuna de vivir contigo algunos años en los que aprendí el valor de la humildad, de la humanidad, el amor, el respeto y la igualdad. En esos años me acerqué demasiado a ti”, continuó.
Asimismo, rememoró que había noches en las que le daba miedo dormir sola y podía dormir con Darío, su abuelo, cuando esto ocurría; “recuerdo que muchas veces te decía que necesitaba un jamón o una mantequilla y llegabas con todo el supermercado, con cosas que me gustaban y que había en la casa, pero solo por darme gusto y verme una sonrisa en la cara, me la llevabas”.
“Compartíamos todo lo que nos había pasado, las cosas tan simples son las que ahora valoro, esos saludos por la mañana, tú haciendo tu tinto y yo desayunando para ir al colegio”, dijo la joven, quien, además, agradeció a su abuelo por ser esa persona que “entregó todo de su ser, por ser mi apoyo incondicional, por ser el mejor ejemplo, por aconsejarme, corregirme y darme tantas lecciones de vida”
La joven, en medio de sus recuerdos y sus muy sentidas palabras, dijo: “Como dice tu canción, Nadie es eterno en el mundo y tú no fuiste la excepción, pero eternas serán tus canciones y eternos serán los recuerdos que nos dejaste. Te amo hasta el cielo, como siempre te lo decía, y vuela alto, muy alto, cuídanos a todos desde arriba”.
Te voy a llevar siempre en mi corazón, quedarás en el corazón de todas las personas porque tú, tú Darío Gómez, dejaste una huella en este mundo. Gracias a ti hay mejores personas. Gracias a ti se sanaron corazones con tu música. Gracias a ti las personas encontraron el verdadero valor del respeto”, destacó la nieta.
“Eres todo en mi vida, abuelito, tú más que nadie sabe cuánto te amé y cuánto te voy a seguir amando. Desde hoy cambia la vida de mi familia por completo y la de muchas personas también. Te fuiste, pero sé que no nos abandonaste. Sé que siempre nos acompañaras, sé que siempre nos cuidarás, pero también sé que llegó tu hora, que Dios te llamó para estar en el reino de los cielos y que si fue así, lo tenemos que entender y respetar”, con gran dolor agregó.
“Dios nos dejó compartir miles de cosas contigo, nos dejó ser parte de tu vida y debemos estar demasiado felices por eso. Ahora más que nunca debemos alzar la cabeza en tu nombre y presumir a la persona que fuiste, el gran ser humano que nos enseñaste a ser”, dijo la joven.
Finalizó su intervención afirmando: “Este es el momento en el que todavía me parece mentira que no estés, te veo ahí y siento que estás dormido, miro tus ojos cerrados y los sigo mirando con fuerza esperando que los abras. Siento que estás de viaje en un concierto y que después vas a llegar a estar con todos nosotros; estás de viaje, sí, un viaje muy largo que durará por siempre”.