El programa La descarga, de Caracol Televisión, ha cosechado una amplia fanaticada desde su lanzamiento. Con un formato lleno de música, esta producción ha dado pie para que artistas emergentes puedan mostrar su talento.
Durante la emisión del 28 de febrero, una historia compartida por el participante Oropesa se llevó toda la atención de los espectadores, así como la de sus compañeros. La razón por la que en ese momento no iba a desayunar fue el punto de partida para que el artista recordara el duro pasado que vivió cuando estaba en Cuba.
“(...) No me da deseo, pues no me entra la comida a esta hora. Yo creo que es una cosa de Cuba, de cuando vivía en Cuba. Ya no lo veo así porque aquí tengo de todo, pero como que me quedó esa vaina de almorzar o desayunar”, dijo Oropesa al principio de su relato.
“Cuando decidía desayunar, que generalmente era los fines de semana, era un pedazo de pan con aceite y sal, y agua con azúcar. Ni pensar en hacer uno huevitos revueltos. Lo que pasa es que los huevos en Cuba son como plato fuerte, y muchas veces había que preparar un huevito en tortilla para cuatro”, agregó.
“Yo nunca había visto la carne”
Mientras Oropesa contaba su historia, sus compañeros no podían ocultar sus expresiones de asombro. La dura realidad que vivió en Cuba aún le pesa y, de hecho, aún lo asombra cuando visita ese país.
“La última vez que fui a Cuba, iba a comprar un cartón de huevos y me costó 25 dólares, es costoso (...). La primera semana que ya estaba en Colombia, me llevaron a comer a un restaurante y me pusieron un pedazo de carne de res; yo nunca había visto la carne de res en 23 años. Me pusieron un filete de carne de res y yo lloraba comiéndolo”, recordó Oropesa.
Su estilo de vida en Cuba lo condicionó demasiado. Incluso, contó que en aquella cena, veía a la familia comiendo con mucha tranquilidad, pero él solo podía pensar en la necesidad de guardar, porque era “la mentalidad con la que venía”.
La comida no era su única necesidad. El joven artista expuso que, en caso de que le preguntaran qué lleva a Cuba para regalar, diría que crema dental.
“Ustedes no saben la cantidad de veces que me tuve que lavar los dientes con sal porque no había pasta dental, o la cantidad de veces que me tuve que echar bicarbonato debajo del brazo porque no tenía desodorante”, reveló Oropesa.
“Mis pies son así de desfigurados porque yo estuve un año completo yendo a la escuela con dos tallas de zapatos menos. O sea, yo soy 42 y estaba en un 40 porque no habían zapatos, eran los únicos. Yo iba en chanclas hasta la esquina y me ponía los zapatos (...). De cierta manera, uno aprende a vivir con esa austeridad. Bueno, por eso no desayuno, chicos”, concluyó el participante de La descarga en su sentido relato.
A través de YouTube, varios usuarios reaccionaron a la historia de Oropesa y manifestaron sus opiniones frente a la realidad en ese país. Así mismo, hubo quienes politizaron el discurso y establecieron comparaciones con Colombia.
“Nunca le he comido cuento al gobierno cubano, ese modelo solo empobrece y hace sufrir mucho a la gente. Un ejemplo claro es lo que cuenta Oropesa”; “y aquí cierto presidente hablando maravillas de Cuba”; “qué bueno que Oropesa haya podido salir de la dictadura cubana y que ahora pueda vivir de su trabajo, comer lo que quiera y comprar zapatos de su talla”, dicen algunos de los comentarios destacados.