Este sábado, 6 de mayo, los ojos del mundo estuvieron puestos desde tempranas horas del día en la ciudad de Londres, donde se dio la coronación de Carlos III como rey británico.
Más de 2.000 invitados especiales, entre jefes de Estado, reyes y miembros de diversas monarquías de todo el planeta, así como políticos y representantes de la sociedad civil, asistieron a la ceremonia en la Abadía de Westminster, en el centro de la capital inglesa.
En el evento, Colombia estuvo representada por la primera dama, Verónica Alcocer, y el canciller Álvaro Leyva Durán.
De punta en blanco
Precisamente, el afamado diseñador de modas tolimense Diego Guarnizo le reveló a SEMANA algunos detalles del elegante vestuario que lució la primera dama durante la ceremonia de coronación de Carlos III.
Según cuenta Guarnizo, el diseño del vestido “estuvo inspirado en el territorio nacional y está compuesto por tres piezas hechas a su perfecta medida: un enterizo con plisados hechos a mano en chifón de seda, un abrigo largo con espalda asimétrica y una chaqueta corta con mangas tres cuartos”.
En cuanto al material de estas prendas, se sabe que se trata de un crepé liviano de seda, “decorado con tejidos indígenas de la comunidad indígena embera, que ha sido desplazada por la violencia desde el sur del departamento del Chocó y que hoy se encuentra ubicada en Pereira, en Risaralda”, puntualiza el diseñador que hace poco abrió las puertas de su exclusiva tienda en el Centro Comercial Andino de Bogotá.
El traje se destaca especialmente por sus finos tejidos. “Los tejidos fueron elaborados con chaquiras, por la indígena embera Gladys Nacavera Güipa, quien lidera a más de 200 mujeres de su comunidad y quienes, día a día, tejen pensamientos bonitos en sus piezas artesanales con el fin de dejar registrada la memoria constructiva de nuestro país”, explica Guarnizo.
Y comentó que, de acuerdo con Gladys Nacavera, “el tejido artesanal del vestido de la primera dama se llama Umandajino”, que significa ‘Mujer sol, mujer luz, madre de todos y vida’.
Además, según Guarnizo, tanto el vestido como los tejidos artesanales son blancos, “un color que se escogió por su significado de apertura, crecimiento, imparcialidad y paz”.
Este vestuario tiene una particularidad: había sido diseñado por Guarnizo, varios meses atrás, con motivo de la posesión del presidente Gustavo Petro, el pasado 7 de agosto. Sin embargo, al final, la primera dama eligió un enterizo blanco creado por el diseñador Virgilio Madinah.
Fue así como el día de la posesión, Verónica Alcocer sorprendió con un look creado por un diseñador sucreño, y le apostó a dejar atrás la costumbre de llevar vestidos a este evento y optar por un pantalón.
El outfit de ese día lo complementó con un detalle que no pasó desapercibido: un broche con la imagen de la Virgen de la Milagrosa, símbolo de devoción y fe. Una pieza engastada con filigrana, a juego con los botones de plata y fabricada en Santa Cruz de Mompox.
Sin embargo, para esa misma ocasión el creativo tolimense diseñó el vestuario que lucieron las hijas del presidente Gustavo Petro, Sofía y Antonella.
En el caso de Antonella, la hija menor de Petro optó para la fiesta que se realizó después de la posesión presidencial, una creación pensada especialmente para ella, que llevaba consigo la impresión de una carta que el mandatario le había entregado al cumplir los 14 años.
El diseñador Diego Guarnizo señaló en su momento que la pieza fue bautizada precisamente Carta de amor y comentó que para su elaboración se usó material reciclado.
“Una carta de amor. De Gustavo para Antonella. Un sentimiento hecho moda. De su puño y letra, el presidente registró el amor por su hija y quedó impreso en una prenda de vestir hecha con poliéster reciclado. La moda es amor. Gracias #AntonellaPetro”, escribió en sus redes sociales Guarnizo.