Hace 38 años, la escritora inglesa Agatha Christie cedió a su nieto Matthew, de diez años, la propiedad de los derechos sobre su obra de teatro "La ratonera". Casi cuatro décadas después de su estreno, la obra continúa en cartelera en Londres. Interpretada por diez elencos diferentes, las recaudaciones de taquilla han reportado 30 millones de dólares (15.700 millones de pesos). El caso de esta obra, considerada la más productiva en la historia del teatro, no es aislado tratándose de Agatha Christie. Veinte años después de haber escrito su última línea, la sociedad que administra los derechos de la autora, recibe anualmente ingresos que se aproximan a los veinte millones de dó1ares. Eso sin contar los derechos por las series de televisión o las películas basadas en sus obras. Quince años después de su muerte, la reina del misterio sigue siendo una mina de oro editorial. Con 400 millones de libros vendidos en todo el mundo, traducidos a 50 idiomas. Estas cifras sólo son comparables con la venta de las obras de Shakespeare o "El Quijote", pero con la diferencia de que aún tienen vigentes sus derechos. Por ello, las sumas que se manejan en torno a la edición de sus obras, la convierten en un caso único en la historia de la literatura desde el punto de vista comercial. Cuando Agatha Christie murió, se había convertido en la escritora más leída de todos los tiempos. Con más de un centenar de novelas publicadas, sus ingresos anuales se aproximaban a los 30 millones de libras esterlinas (30 mil millones de pesos). Pero mientras sus primeras novelas apenas le reportaron para vivir decorosamente y sostener los gastos estrafalarios de su primer marido, Archibald Christie, la editorial que hoy maneja la venta de sus obras ha llegado a convertirse en una próspera industria publicando exclusivamente sus novelas. Pero quizás lo que más sorprende a sus seguidores es el hecho de que esta ama de casa tímida, metódica y conservadora, cuyo mundo se reducía a una tranquila vida hogareña, hubiera sido la creadora de tantos y tan intrincados relatos delictivos, cuyas apasionantes tramas siguen conquistando adeptos. En los 85 años de vida de Agatha Mary Clarissa Miller -su verdadero nombre sólo hubo un episodio novelesco, que quedó en el más completo misterio. Ocurrió en 1926, cuando acababa de publicar "El hombre del traje castaño" y empezaba su arrollador éxito editorial. Repentinamente la escritora desapareció de su casa. Su carro fue encontrado en la orilla de un camino. Durante diez días, 550 policías y 15.000 voluntarios y periodistas la buscaban por todos los rincones de Inglaterra. Las conjeturas no se hicieron esperar. Se habló de suicidio, de secuestro o de un intempestivo ataque de amnesia. Ella nunca confesó dónde había estado. Algunas versiones señalaban que, haciendo gala de su habilidad para crear situaciones de misterio, se había marchado de incógnita a un balneario para conocer personalmente a la mujer de la cual su marido le acababa de confesar que estaba enamorado. Se dice que durante este tiempo, trabajó como cantante en un hotel bajo el nombre falso de Teresa Neele. Otra versión, que fue tema de una novela de "Agatha", de Kathlen Tynan, señala que en un momento de crisis de su matrimonio, la escritora sostuvo un apasionado y fugaz romance con un periodista norteamericano. Esta historia fue llevada al cine por el productor Michael Apted, protagonizada por Vanessa Redgrave y Dustin Hoffman. Ahora, cuando se celebran cien años de su nacimiento, el éxito de Agatha Christie continúa con la misma pujanza. El pasado 15 de septiembre, su ciudad natal, Torquay, fue el centro de reunión de más de un centenar de estudiosos de su obra, llegados de todo el mundo. Aunque en este género han surgido mejores exponentes y los especialistas cuestionan la validez literaria de su estilo, lo cierto es que Agatha Christie sigue siendo la más popular de los escritores de novela policíaca. Para conmemorarlo se planea una reedición de todas sus obras y ya la editorial americana Harper & Row pagó, en una subasta pública, la suma de diez millones de dó1ares por los derechos de publicación de 30 de sus novelas. Por algo se dice que, después de Lucrecia Borgia, Agatha Christie es la persona que más ha ganado con el crimen. LOS AMANTES DEL MISTERIO: GONZALO MALLARINO:Columnista y comentarista literario "Le dediqué muchas horas de viajes y de insomnio. Aunque un poco candorosa cn sus relatos, fue sin duda una narradora diestra, creadora de tramas muy bien diseñadas y personajes tan vitales como el detective Hércules Poirot. Aunque la novela policíaca tiene exponentes con mayor calidad literaria, ella ha sido sin duda la más prolífica". ROBERTO BURGOS. Escritor. "Dicen que todo lo que es desconocido pasa por ser espléndido. Tal vez allí se esconde una parte de su estrategia narrativa. En los múltiples casos que su imaginación postulo, en un ajedrez imprevisto pero probable, lo que al lector se le deja saber es distinto a lo que mira y analiza el personaje que investiga. Es un juego de conjeturas. Y la conclusión del investigador es una sorpresa que únicamente aparece al final de la narración. Pero ella aparece salvada del cambio impiadoso que fue la novela negra, la cual sustituyó la inteligencia analítica por la intuición poética". JULIO JIMENEZ. Libretista de television. "Más que sus novelas me interesan sus obras llevadas al cine. Ella construyó un patrón de juego sobre el asesino y el inocente que todavía sigue siendo entretenido para quienes escribimos relatos de misterio".