Parecía una historia sacada de una película: la barranquillera Geraldine Fernández Ruiz contó a través de entrevistas con varios medios de comunicación, unos días atrás, que había hecho parte del equipo de ilustradores de la película El niño y la garza, que llegará precisamente a los cines colombianos este 25 de enero y que hasta ahora ha cosechado importantes premios internacionales, entre ellos el de mejor película animada en los pasados Globos de Oro, que se entregaron hace solo una semana.
La historia de Geraldine Fernández era entonces de admirar: que una joven colombiana no solo hiciera parte de las grandes ligas de la ilustración, sino que además lo lograra, trabajando desde Colombia, para uno de los estudios más prestigiosos del mundo: el Studio Ghibi, originario de Japón, que tiene detrás a un verdadero genio de este arte: Hayao Miyazaki. Una leyenda del cine pues consiguió lo impensable: destronar a Disney en la industria de la animación con el Óscar a mejor película animada con El viaje del Chihiro, en 2023.
Esa fue la hazaña que relató Fernández, una y otra vez, incluso en talleres de animación donde pronto se convirtió en estrella: que ella realizó buena parte de las ilustraciones de la galardonada película, que muchos desde ya vaticinan que se quedará con el Premio Óscar de este año.
En varios espacios, Geraldine indicó que su trabajo con el Studio Ghibi era tan cercano, que la llamaban ‘la colombiana’ y se comunicaba con Miyazaki por Meet. Pero, pese a que contó que realizó unos 25 mil fotogramas para la película, su nombre no aparece en los créditos de la misma.
Según el relato de la ilustradora, cuyo título profesional también está en duda, ella incluso asistió a la reciente ceremonia de los Globo de Oro, por lo que aprovechó para agradecer el apoyo de empresas como Tecnoglass y a su dueño, el empresario Christian Daes, en donde trabaja desde hace seis meses.
Pero todo resultó un engaño. Un trino comenzó a coger fuerza este lunes, encendió las redes y pronto Fernández pasó del anonimato al desprestigio: “Esta señora ha estado diciendo que trabajó en El niño y la garza. Dice que ella dibujó 25 mil fotogramas de la película por su cuenta en Colombia y que Miyazaki sabía su nombre. Se llamaba a sí misma ilustradora todo el tiempo, pero nunca muestra un solo dibujo. Las pelotas para mentir”, rezaba la publicación, escrita en inglés, de la usuaria Julieta Colás.
Abrumados por la evidencia y consternados por la capacidad de invención de la barranquillera, el propio Christian Daes salió en su cuenta de X a contar que fueron engañados: “A mí me llegaron con la historia de Geraldine y su éxito y yo me alegré por ella. Me mostraron una entrevista que ella había dado en un medio internacional. Lástima que todo fue producto de su imaginación. Pido disculpas por no haber investigado más a fondo”, escribió Daes.
La tarde de este lunes, Geraldine Fernández participó en un espacio de Twitch en el que se mantuvo en su versión que su historia era real y que se encargaría de pedir los certificados que así lo comprobaran.
Pero en las propias redes no ha dejado de ser tendencia y han llovido toda suerte de memes alrededor de esta historia de la que aún no se escribe el capítulo final.