En Colombia hay un gran número de artistas que continúan la tradición de la música vallentata, ganando gran reconocimiento gracias al éxito que han tenido las letras de sus canciones.
Uno de los más populares es sin dudarlo, Felipe Peláez, cantante y compositor colombo-venezolano, que a sus 48 años, se ha convertido en un referente del género, llegando a ser inspiración para los nuevos artistas.
Y es que con canciones como Vivo pensando en ti, La que se fue, se fue, Tan natural, El amo más grande del planeta, Lo tiene todo, entre otras, ha puesto a cantar a cientos de personas, ganando un gran número de seguidores.
Durante su vida artística ha compuesto grandes temas, que han conmovido o alegrado la vida de sus fans, quienes aunque al seguir su trayectoria artística creen saber casi todos los detalles del artista, lo cierto es que no es así y Peláez se guarda algunos detalles para su intimidad.
Así lo reveló recientemente, luego de que en medio de una entrevista, confesara una complicada situación de salud que vivió hace un tiempo, que lo envió a UCI por varios días y hasta estuvo en peligro su vida.
La afectación de salud de que envió a UCI a Felipe Peláez
La revelación la hizo en medio de una entrevista que dio a la periodista Cristina Estupiñán para su formato, Sinceramente Cris, donde estuvo acompañado de su hija Sara Peláez.
Mientras estaban hablando del nuevo trabajo musical de Felipe, Estupiñán le indagó sobre una canción que hay en el disco, que está dedicada a Dios, preguntándole si en algún momento de su vida él dijo o sintió que sin Dios no podía, logrando que el cantante confesara aquella época en la que se afectó su salud.
“Hace cuatro años me dio una disección en la carotidea. Es como un taponamiento de la arteria y me daban unos dolores de cabeza horrible y yo decía: ‘¿Qué pasa?’ Me tomaba un analgésico o algunas pastas y un día me fui al hospital porque no aguantaba más el dolor “, inició contando Peláez.
Según comentó, en aquel momento tuvo que ser internado en UCI, por que estuvo a punto de sufrir neurisma, lo que pudo ser letal.
“A las 3:00 a. m. me cogió el dolor de cabeza espantoso y quedé tres días en UCI porque caí en etapa crítica para que no me diera una neurisma. Ya estábamos finalizando la pandemia, si no llego antes, no sé que hubiera pasado”, expresó en la conversación.
Por fortuna y gracias al equipo médico se pudo recuperar, aunque comentó que, “Fue terrible, pero gracias a Dios, la sacamos adelante. Estuve un año de tratamiento lento en silencio con resonancia magnética una vez al mes, muy asustado hasta que por fin salí”.