La historia de amor de Felipe Arias con Viviana Montenegro ha conmovido a los colombianos. Los televidentes la conocieron especialmente hace un tiempo cuando el querido presentador de RCN colapsó en el set de grabación a causa de una complicación en su corazón. El amor de Vivi y sus cuidados lo sacaron adelante, según contó él en varias entrevistas en las que aparecieron juntos.
En el pódcast Sinergéticos, Arias contó cómo se conocieron y sorprendió a muchos. “Conocí a mi esposa y me invitó a un grupo de oración. wow... me metí con una fanática y la juzgué. No quería ir, quería que nos viéramos en otro escenario. Ella me dijo: si me quieres conocer, ven al grupo de oración”, narró.
El periodista, que no era muy de acudir a esos grupos, lo pensó con recelo, pero al final se unió por el interés de tener una relación más allá con ella. “Comencé a ver un camino con Dios”, asegura.
En un momento, cuando comenzó a cortejarla, el periodista se sorprendió por algo que ella le reveló. “Cuando ella me dice estoy en castidad... no existía Google para saber eso que es. Ella me dijo que quería hacer las cosas en el nombre de Dios y yo me voy a entregar es al hombre que va a ser el hombre de mi vida”.
El periodista contó que de inmediato pensó: “Yo quiero ser... Me arrodillé y dije: le seré fiel el resto de mi vida”, cuenta.
Vea el video
La transformación de Felipe Arias
El presentador de noticias Felipe Arias tuvo que pasar por una complicada situación de salud que incluso lo llevó a estar cerca de la muerte. El periodista de RCN estuvo varios días hospitalizado y muchos otros en recuperación. Por suerte, volvió a su trabajo en los medios de comunicación y se encuentra muy bien de salud.
Luego de este difícil momento, el presentador caldense tuvo que cambiar varios hábitos en su vida, ya que después de lo vivido, debe tener mucho más cuidado con su salud, por lo que su vida cambió completamente.
El periodista estuvo en el programa de entretenimiento Lo sé todo, en el que manifestó que debido al complicado momento médico que vivió, bajó notablemente de peso y que de ahora en adelante debe ser mucho más cuidadoso con su alimentación para que no se vuelva a repetir lo ocurrido hace un año.
“He perdido 16 kilos y me toca cuidarme con el ejercicio, buena alimentación, bajarle al estrés. Creo que he vivido mucho mejor en el último año porque uno aprende muchas cosas”, dijo el manizaleño.
Además, confirmó que debe seguir instrucciones médicas para poder tratar de vivir saludablemente, porque sintió que la muerte estuvo cerca: “Estoy ajustándome a las pastillas, tengo menos medicamentos y todo es ganancia. Casi no llego a los 50, llegué arrastrado, pero creo que voy a vivir unos 50 más, si Dios quiere”, manifestó Felipe Arias.
Todos estos problemas de salud llevaron a que el presentador se alejara de la noche, se acercara a su espiritualidad y a que evitara algunos alimentos que no le hacían bien en su recuperación.
“Tengo una dieta estricta: evitar el pollo, la carne y el pescado; un poquito vegetariana, pero de vez en cuando hay que darse licencias”, dijo Arias.
El presentador había tenido problemas de salud hace un año de manera inesperada en pleno set de grabación de noticias RCN, donde ha trabajado los últimos años. Felipe Arias comenzó a sentir un dolor muy fuerte en el pecho, por el que tuvo que ir inmediatamente a la clínica.
Allí, los profesionales de la salud identificaron que el periodista presentaba un problema cardíaco. Esto lo tuvo al borde de la muerte; sin embargo, Arias logró superar la difícil situación y actualmente se puede ver en un muy buen estado físico, pese al momento difícil que le tocó vivir.
Actualmente, Felipe Arias tiene 50 años y continúa trabajando como periodista, oficio en el que se ha dedicado en los últimos años a ayudar a otras personas en una sección que él conduce. El periodista es recordado entre los colombianos por la frase que lo hizo popular: “No se quede callado, denuncie”.
El periodista contó que ahora vive su vida de manera diferente, disfrutando cada momento con su familia, llevando una vida sana y disfrutando de la nueva oportunidad que le dio la vida de otra manera: “La noche bogotana tiene un mundo enorme, pero yo no salgo mucho. Después de lo que tuve de salud a veces no es tan fácil porque hay trago, la comida no es tan sana, pero hay que disfrutar la vida, vivirla y disfrutar cada segundo”, contó Arias.
“Yo gritaba ‘no me dejen morir, me estoy muriendo’”: Felipe Arias cuenta lo que vivió cuando tuvo un ataque al corazón grabando una entrevista
“Encontré ese día absolutos ángeles”, asegura el presentador Felipe Arias. El periodista estaba al aire, haciendo una entrevista a la mamá de uno de los policías que había fallecido en un ataque de inseguridad en el norte de Bogotá. “Yo tenía ya la tráquea mal. El pecho oprimido. Comencé a irme”, narra.
El presentador describe lo que sintió en ese momento. “Un dolor absoluto. Abría los ojos y no veía”, relata. Sus compañeros de trabajo pararon la grabación y comenzaron a auxiliarlo. Al comienzo pensaban llevarlo a un puesto de salud, pero él ya sabía que la situación estaba muy mal y necesitaba un hospital de mayor complejidad. “Mi esposa gritaba: ¡No lo dejen morir!”, relata él, quien la veía en video por una llamada por celular.
“Los médicos gritaban. Todos corrían. Me preguntaban datos. Yo no sé si dije algo. Todo me pasaba por la cabeza. Las imágenes de mis hijos, de mi esposa, lo que había dejado de hacer”, agregó. La enfermera me contestó: ‘no te estás muriendo, tienes un infarto’”.
El presentador contó con detalles lo que vivió después en el hospital. “Sentí que se me iba el mundo, que se me iba la vida”, cuenta.
“Tengo tres hijos, tengo un emprendimiento, tengo unas familias a las que les ayudo. ¿Qué va a pasar? ¿Quién les va a pagar el colegio a mis hijos?”, se preguntaba Felipe Arias mientras estaba en el hospital. “Yo no podía parar el llanto de mi alma. Mi alma lloraba. La enfermera me decía no llores. No hagas ese ruido. Pero mi cuerpo ya no estaba”, agregaba.
Para el periodista, lo que vivió es una invitación para volver a vivir con mayor plenitud. “La vida es frágil. Hay que agradecer. Hay que valorar. Uno va por la vida caminando, hay con quienes uno no está bien. Y todo eso pasa por la mente en un momento así”, cuenta.
“Empecé a pedir perdón, incluso por lo que no he hecho. Pensé en una frase que siempre he oído: ‘El odio es un veneno que uno se toma esperando que el otro se muera’. Pensé que de pronto ya era tarde, ya no sirve. ¿Cuántos abrazos me quedaron por dar? ¿Momentos por vivir?”, contó conmovido.
Al final, al presentador lo operaron pues tenía la arteria 100 por ciento obstruida. Y luego de estar varios días en la unidad de cuidados intensivos, se recuperó. En la noche del lunes estuvo nuevamente un tiempo con Noticias RCN. “Tengo el corazón roto, pero el alma plena”, dijo al regresar.