El pasado 28 de diciembre, España amaneció con la noticia de la ruptura entre Mario Vargas Llosa e Isabel Preysler. Luego de ocho años de noviazgo, decenas de portadas en revistas del corazón y miles de fotografías en fiestas y vacaciones de ensueño, el escritor peruano, de 86 años, y la socialité, de 72, ponían fin a una de las relaciones más sonadas e inusuales de Europa.

Solo han pasado cuatro meses desde entonces, en medio de un largo cruce de acusaciones, que van desde los celos excesivos y sin motivos por parte del Nobel peruano, hasta la tacañería del escritor y lo extraño que siempre se sintió en el mundo de la filipina, marcado por los eventos sociales y la prensa rosa.

Desde ese momento, a Vargas Llosa se le vio varias veces acompañado de sus tres hijos y su exesposa, Patricia Llosa, que estuvo a su lado incluso en París, cuando el autor fue incorporado a la Academia Francesa de las Letras.

Los celos sin justificación de Mario Vargas Llosa habrían sido el motivo de la ruptura con Isabel Preysler. (Photo By Jose Oliva/Europa Press via Getty Images) | Foto: Europa Press 2022

No había sucedido lo mismo con Preysler. Pero, según informaron las Mamarazzis, la filipina ya estaría de nuevo ilusionada.

Lorena Vázquez y Laura Fa revelaron en su conocido podcast que Preysler fue vista con el que fuera el viudo de la Duquesa de Alba, el empresario Alfonso Díez, de 72 años, en un conocido restaurante de la capital madrileña con una actitud muy cercana.

Todo ocurrió en el lujoso restaurante del céntrico barrio de Chamartín, donde Isabel y Alfonso se habrían mostrado muy cercanos, junto a una pareja de amigos, dejando entrever que entre los dos existe algo más que una amistad.

Díez y Preysler, de la misma edad, hacen parte del mismo círculo social desde hace muchos años, incluso por los días en que la Duquesa de Alba se encontraba con vida.

La duquesa de Alba da el "sí quiero" a Alfonso Díez en 2011.

Sin embargo, desde la ruptura de la ex de Julio Iglesias con el Nobel peruano son muchos los rumores que indican que el círculo se va estrechando cada vez más entre ellos, pues Isabel ha buscado, tras su ruptura con Vargas Llosa, refugio en sus amistades.

Como se recordará, Alfonso Díez sostuvo una relación romántica con María del Rosario Cayetana Fitz-James Stuart y de Silva, más conocida como Cayetana de Alba o la duquesa de Alba, una noble y aristócrata española.

Pese a que se llevaban 15 años, la relación terminó en matrimonio, el 5 de octubre de 2011, tres años después de conocerse y ante la animadversión de los hijos de la duquesa, por la jugosa herencia que estaba en juego.

Sin embargo, el 20 de noviembre de 2014 la duquesa falleció a los 88 años después de que se le complicara una neumonía.

Según la prensa española, Díez renunció “a los títulos, el usufructo y a todo tipo de reconocimientos que recibiera una vez muerta Cayetana” para no generar suspicacias entre los hijos de su difunta espoa. Aunque eso no significa que no reciba cada mes una pensión vitalicia de 3.000 euros de viudedad.

Vargas Llosa reacciona

Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa sostuvieron un noviazgo de 8 años.

Meses después de conocerse la ruptura entre Preysler y Vargas Llosa, parece que el ambiente está más tranquilo. Pocas semanas más tarde, el escritor rehacía públicamente su vida al lado de su exmujer, Patricia Llosa. Aunque todavía no se sabe si ambos vuelven a ser pareja, no cabe lugar a dudas de que ambos han retomado una buena relación.

Por su parte, la reina de corazones se había mantenido alejada del foco mediático lo máximo posible, sin querer pronunciarse al respecto y sin apenas salir de su casa, hasta la pasada Semana Santa en que fue vista en una cena con Alfonso Díez.

Sin embargo, el empresario reapareció muy nervioso comentando que “es un despropósito” que se le intente atribuir una nueva relación.

El equipo de Europa Press habló con Mario Vargas Llosa, quien contestó que “no va a comentar nada” respecto a estas informaciones sobre su expareja. El premio Nobel guarda silencio al preguntarle si le desea la felicidad a la que fue su novia en los últimos años.

El empresario Alfonso Díez sería la nueva ilusión de Isabel Preysler. | Foto: Getty Images

Por el contrario, el escritor se mostró interesado por conocer las palabras que le ha dedicado Julio Iglesias: “¿Qué cosa ha dicho?”.

Al enterarse de que el cantante explicó que no es muy caballerosa la actitud que ha tenido con Isabel, Vargas Llosa prefiere “no comentar eso”, quedarse al margen y asegurar que se encuentra feliz en este momento de su vida.

Finalmente, desmiente que quiera ser mandatario de su país como tanto se ha comentado: “No quiero ser presidente de Perú”.

Del amor al odio

En todo caso, los detalles sobre los motivos de la separación, lo vivido por la pareja y los malos términos en que acabó todo recorren a placer los medios españoles. Tras la ruptura, parece que el idilio que la pareja mostraba en público solo estaba reservado para las revistas del corazón.

El Nobel peruano ha sido visto en los últimos meses en compañía de su exesposa Patricia Llosa. (Photo by Pablo Blazquez Dominguez/WireImage) | Foto: 2011 Pablo Blazquez Dominguez

Ángel Mustienes, periodista dedicado a cubrir temas de entretenimiento en España y Portugal, sostiene que el enamoramiento fue solo cosa de un par de años: “Por el lado de Vargas Llosa, él vio en Preysler un seguro económico desde que se fueron a vivir juntos en Villa Meona, la lujosa residencia de Preysler en Puerta de Hierro. Vivía sin pagar nada y tenía una lujosa rutina, desconocida por muchos, que incluía a un mayordomo que le preparaba la ropa cada vez que salía e incluso le ayudaba a vestir. Y eso a ella ya comenzaba a cansarla desde hacía varios años”.

“Y no se entiende”, asegura Mustienes, pues el peruano tiene una fortuna “calculada en más de 10 millones de euros y un contrato con una editorial, que le paga por adelantado un millón y medio de euros antes de la publicación de sus libros”.

En opinión del periodista, el peruano se valía de Preysler para tener repercusión en sus lanzamientos literarios, dada la atracción que la filipina genera en la prensa.

De acuerdo con el periodista, lo que ha seguido después de la ruptura se asemeja más a “cosas de adolescentes que a dos personas de edad serena y madura”.

Preysler, quien en un comienzo atribuyó la ruptura a los celos excesivos e injustificados del escritor, les contó a los medios que desde hace un par de años quería terminar con Vargas Llosa, pero sintió “lástima por él”, dada su avanzada edad.

Además, se encargó de filtrar una carta que le envió la propia Patricia Llosa poco después de que Preysler iniciara su romance con el escritor. “Lo ha hecho otras veces”, le advertía una decepcionada esposa, un gesto que la filipina ignoró.