La ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París comenzó el viernes a las 7:30 p. m., hora local, con la retransmisión de una película protagonizada por el cómico Jamel Debbouze y Zinédine Zidane en el Estadio de Francia, antes del histórico e inédito desfile de delegaciones por el río Sena.
Unos 6.800 deportistas recorrieron la capital a lo largo de 6 kilómetros a bordo de 85 barcos y ante 320.000 espectadores, durante una ceremonia de 3 horas y 45 minutos que inauguró la quincena olímpica.
El desfile de las delegaciones llamó la atención de los curiosos, debido a los shows que aparecieron en el intermedio. Varios artistas se encargaron de poner a bailar a los presentes, dándole un giro inesperado a esta inauguración de los Juegos Olímpicos París 2024.
Cerca del final de esta ceremonia de apertura, las miradas de los curiosos se posaron en Céline Dion, quien regresó a los escenarios y brindó una presentación muy especial. Su retorno en un espacio tan importante como este le permitió robarse los corazones de los espectadores, siendo aplaudida y elogiada.
De acuerdo con lo que se observó, la canadiense interpretó un tema en francés, descrestando con un show lleno de brillo y ritmos suaves. Lució un vestido elegante y lleno de luz, cantando desde lo alto de la torre Eiffel.
Es la segunda vez que la celebridad canta en este evento, ya que en Atlanta 96 también desató euforia con su presentación.
Arranque de los Juegos Olímpicos París 2024
Todos los elementos para la fiesta están. Banderas de todos los países en los asientos, que el público agita sin dudar, gastronetas y puestos de bebidas para reponer fuerzas durante las más de tres horas de ceremonia.
Y artistas internacionales, como Lady Gaga, que con un traje de plumas negras abrió el baile de estrellas de la música, interpretando a los pies de una escalera del Sena la canción Mon Truc en Plumes.
Una actuación que cumple las expectativas de Maximiliano y Dylan, dos parisinos de 29 años que pagaron sus entradas más de 1.600 euros (1.730 dólares) por persona para presenciar la ceremonia, cerca de los Inválidos.
“Estamos muy emocionados. Esperamos un espectáculo grandioso, lleno de emociones. Ambos somos hipersensibles y seguro que lloraremos”, dijo el primero, un franco-colombiano, antes de su inicio.
Para no perderse detalle de la ceremonia, se instalaron pantallas gigantes para contemplar las mismas imágenes que cientos de millones de telespectadores en el mundo.