Cuando de amar se trata, no todo es bello, por más que el cine romántico de Hollywood lo haga ver así. En ocasiones ni siquiera por algo al interior de la relación, sino por factores externos. Tal es el caso de Kathy Sáenz, quien recientemente destapó lo difícil que llegó a ser su noviazgo con Sebastián Martínez por cuenta de algunos comentarios.
Kathy Sáenz le lleva 11 años de edad a Sebastián Martínez, con quien tiene un hijo. Aunque hoy posan felices para las fotos, cuando comenzaron tuvieron serias dificultades. Por más que ambos remaron hacia el mismo lado, ella no la pasó nada bien, como lo contó en conversación con la revista Vea.
Según la actriz, como ella tenía 34 años y Sebastián Martínez 23, la hicieron sentir “la peor mujer del mundo”, como si fuera un pecado enamorarse de alguien más joven y que dicho amor fuera correspondido. “Tuve mucho dolor y sufrimiento”, agregó. No era para menos: debe ser todavía más duro lidiar con las críticas por un amor cuando se es una celebridad.
Por fortuna para Kathy Sáenz, también encontró refugio en algunas mujeres, que lejos de cuestionarla por algo tan bonito como romper los estereotipos en torno al amor, como la diferencia de edad, le expresaron su apoyo.
“Las encontré en la calle y me decían: ‘Yo tengo una pareja que es menor que yo y nunca podía decir’ y fue así. Es que uno se enamora del alma, uno no se enamora de la edad”, comentó la actriz.
En la actualidad, sin embargo, a Kathy Sáenz ya no la critican como antes, aunque sí hay actrices que son cuestionadas por estar con hombres menores que ellas. Tal es el caso de Alina Lozano, novia de Jim Velásquez, a quien le lleva 30 años.
Sebastián y Kathy Sáenz, como niños en el aeropuerto El Dorado
Días atrás, la pareja y su hijo de 14 años aprovecharon su paso por la terminal aérea El Dorado para darles un uso adicional a sus maletas, que repletas de sus pertenencias personales hicieron las veces de “carritos chocones”, perfectos para que tanto los actores como el corredor de karts se montaran en ellas y resbalaran por el primer piso del aeropuerto, impulsados por sus propios medios.
Tal como lo mostró Martínez en sus historias de Instagram, tanto él como su esposa y su hijo se deslizaron a su antojo, haciendo piruetas y mostrando las grandes destrezas que tienen en cuanto a equilibrio se refiere. Manejar una maleta de viaje no es nada fácil, más cuando no hay cómo manejar su dirección ni mucho menos un freno con qué intentar detenerla para no colisionar contra las paredes o escaleras eléctricas del lugar.
De los tres, Sebastián fue el que más seguro se mostró, pero yendo de forma lineal y sin intentar cambiar de rumbo o de posición. Por su parte, Kathy sí tuvo algunos problemas para controlar su maleta y siempre estuvo alerta a una eventual caída que parecía inminente. Por otro lado, Amador disfrutó su trayecto, dio giros como todo un experto y fue el que menos miedo mostró en su trayecto.
“Martínez Sáenz Racing Team”, fue el título que el actor paisa le puso a su grupo de corredores de maletas, dejando así un recuerdo más, y uno de los más divertidos, para su repertorio familiar. Dicho viaje es parte de la formación que Sebastián y Kathy están fomentando y acompañando en Amador, quien se perfila como un corredor de carros de primera, pues desde muy pequeño encontró en los karts su pasión.