Tras 20 temporadas y cientos de cambios vividos frente a las cámaras, este martes Kim, Kris y Khloe publicaron en sus cuentas de Instagram que, como familia, decidieron ponerle fin a su ‘reality show‘ "Keeping up with the Kardashians", el programa televisivo que catapultó a la fama al clan Kardashian/Jenner.
En un comunicado que compartió en sus redes sociales, Kim Kardashian West comentó que sin el ‘reality‘ “no estaría donde estoy hoy. Estoy increíblemente agradecida con todos los que nos han visto y apoyado a mí y a mi familia estos últimos 14 años”. “Este espectáculo nos hizo quienes somos y estaré siempre en deuda con todos los que desempeñaron un papel en la configuración de nuestras carreras y cambiar nuestras vidas para siempre”.
En efecto, gracias al programa del canal E! Entertainment Television, que emitirá en 2021 la última temporada, la familia Kardashian/Jenner capitalizó no solo una fama sin precedentes, sino una envidiable fortuna.
El ‘reality‘ empezó documentando la vida cotidiana de Kim, quien para mediados de 2007 era conocida por ser una de las amigas de Paris Hilton y llevar un estilo de vida lleno de excesos y lujos. Pero su paso definitivo a la fama fue la publicación de un video pornográfico que grabó con su novio de entonces, el rapero Ray J. La productora de cine para adultos Vivid Video anunció que comercializaría la cinta entre sus clientes, a lo cual Kardashian West respondió con una demanda que le otorgó un arreglo de 5 millones de dólares.
A partir de ese episodio, Kim y sus hermanas han cosechado una gran popularidad en todo el mundo y maximizado sus ganancias. A principios de este año, "Forbes" estimó la fortuna de Kardashian West en unos 900 millones de dólares, luego de que vendiera una participación en su compañía a la multinacional de cosméticos Coty. Su hermana menor, Kylie Jenner, fue incluida en el listado de "Forbes" de los multimillonarios a principios de 2019 gracias al éxito de su línea Kylie Cosmetics. Entre tanto, Kendal Jenner se ha enfocado, sobre todo, en su carrera en el mundo de la moda, llegando a ser en 2017 la supermodelo mejor pagada del mundo, con ganancias estimadas por 22 millones de dólares.