Bill Clinton y su esposa Hillary ya encontraron en dónde vivir cuando terminen su período presidencial en 2001. La pareja ha comprado una bella 'casa blanca' en los alrededores de Nueva York que, si bien no tiene la opulencia de su actual residencia, cuenta con todos los lujos dignos de un ex mandatario estadounidense. La residencia, una mansión estilo colonial construida en 1889, tiene tres pisos, 11 habitaciones, cuatro baños, dos chimeneas, gimnasio y piscina. La exclusiva propiedad les costó 1,7 millones de dólares y, según dicen, lo que más le gustó a los Clinton fue su cercanía a la Gran Manzana ya que de esta forma Hillary podrá lanzarse al Senado por una curul de Nueva York.