Una pareja que está a punto de realizar su ceremonia de boda tuvo una idea que para muchos es extraña, ya que se tomaron varias fotografías al frente de una montaña de basura. Ella con su vestido blanco de novia y el hombre luciendo un smoking.

La pareja sorprendió con su sesión de fotos en el basurero. | Foto: AFP

Todo esto generó revuelo, pero, según información otorgada por la agencia AFP, la pareja quiso pedirle a sus invitados un poco de conciencia sobre la contaminación que se presenta en Taiwán y por ello les pidieron que, al asistir a la fiesta, cada uno llevara su propio recipiente para empacar lo que no se comieran en la celebración.

Aunque el evento se realizará en enero de 2024, los novios quisieron mostrar su preocupación por el daño que se le está haciendo al medio ambiente con la generación de residuos inútiles y que con un aporte se podría ayudar a mejorar la situación.

Iris Hsueh, activista de Greenpeace, y su prometido, tendrán una boda ecológica y por ello le pidieron a sus invitados traer sus propios elementos en caso de que no se coman todo o quieran llevar para sus casas y así no tener que usar plástico, icopor u otros elementos que contaminen.

“Si un invitado no está dispuesto a llevar un recipiente, le muestro la foto y le pido que reconsidere su decisión”, explicó esta mujer de 33 años a AFP.

Cabe resaltar que la pareja viajó durante tres horas desde Tapéi hasta Puli, en el centro de la isla, para poder hacerse la sesión de fotos en un basural.

La pareja se tomó las fotos para dar un mensaje a sus invitados | Foto: AFP

El basurero de Puli crece cada año y la problemática se vuelve más difícil de controlar. Aunque Taiwán es una isla que tiene un gobierno propio y desde 1987 maneja los residuos domésticos con un programa de reciclaje, no está exenta de tener una de las tasas más altas del mundo en contaminación.

Chen Chun hung, es el responsable del equipo de saneamiento de la comuna de Puli, le aseguró a la agencia que la cantidad de basura que llega ha aumentado de manera significativa.

Sobre el año 1980 llegaban al vertedero unas 20 toneladas diarias y ahora se reciben 50 toneladas de desechos por día.

“Nuestra población disminuye, pero la cantidad de basura aumenta cada año”, señaló.

Puli, que ahora es un basurero, empezó como un “estacionamiento para camiones de basura y su uso como lugar de almacenamiento de los residuos debía ser temporal”, indicó Chen. Pero al parecer el tiempo se alargó y lleva así tres años.

Las fotos de Iris Hsueh se volvieron virales y no solo su familia y amigos han tomado conciencia de lo que está pasando, sino millones de personas en todo el mundo, pues no es solo una problemática que se presenta en Taiwán sino en general.

La idea de la pareja al parecer les funcionó y han recibido comentarios de muchas personas sobre la manera en que se está produciendo basura.

La isla de Taiwán tiene 23 millones de habitantes y la preocupación del gobierno es que la cantidad de basura que se está generando no tiene un equilibrio con la población actual, por ello, la iniciativa de esta pareja de novios logró cautivar a muchos.

Lo que ellos esperan es que su idea no sea solo para el día de la gran boda, sino que se empiece a tomar acción desde ya y que sus invitados puedan aportar un granito de arena.

“¿Y qué pasará el día del evento? Espero ver a todos con un recipiente”, subrayó Hsueh con una sonrisa a la agencia AFP.

Iris Hsueh, activista de Greenpeace quien está próxima a casarse. | Foto: AFP