Alicia Mejía, directora de ferias de Inexmoda, se encontraba en medio de una cita médica cuando entró una llamada de su secretaria anunciándole que tenía en la línea a Oscar de la Renta. La noticia la impactó pues no en vano llevaba más de seis meses tratando de localizarlo, a través de sus amigos Julio Mario Santo Domingo y Augusto López , para invitarlo al desfile de Americamoda. Incluso le había enviado una carta con María Emma Mejía, aprovechando la entrevista que ésta le haría en República Dominicana para el programa Especiales de fin de siglo. Cuando tomó el auricular De la Renta le dijo: "Tengo tu invitación. ¿Me estás ofreciendo que no lleve mi colección y a cambio me dan una medalla? No quiero hacer un show con mi presencia, si voy, iré con mi colección".Al oírlo Alicia Mejía casi se cae de la emoción. Cuando hizo los planes de traerlo, junto con Roque Ospina y Clara Echeverri, nunca aspiró a que el diseñador participara en el desfile con la colección que acababa de presentar en Nueva York. Después de un corto diálogo convinieron en encontrarse el 4 de mayo en la oficina de éste en el 550 de la Seventh Avenue en Nueva York.Ese día a las 10 en punto Alicia Mejía, de Inexmoda, y Margarita Gómez y Ana Cecilia Posada, de Informa, la agencia de modelaje a cargo de Americamoda, se encontraban cara a cara con Oscar de la Renta.El diseñador se veía de buen humor. Estaba vestido con un traje azul de raya tiza, zapatos color miel y lucía atractivo y simpático. En la esquina de su escritorio había un cerro de invitaciones con propuestas de todo el mundo solicitándole que los visitara para infinidad de eventos. "Es imposible que vaya. Mi ocupación es muy demandante y cuando salgo de una colección me entrego de lleno a preparar la próxima temporada. Además tengo otro sinfín de ocupaciones. Por eso solo voy a muy pocas, especialmente aquellas en las que nos asisten intereses comerciales".Al trío de colombianas se les fue la respiración. ¿Acaso trataba de insinuarles que no aceptaría? Entonces Alicia Mejía sacó un as. Sin dejarlo terminar empezó a contarle nuevamente cómo sería el desfile. Se desarrollaría en el salón principal del Country Club de Medellín y los recursos se destinarían a la malograda región del eje cafetero. Inmediatamente Margarita le mostró las fotografías de las modelos colombianas y casi sin darse cuenta el mismo Oscar de la Renta empezó a aportar ideas.Al rato comentó: "No he estado en desfiles donde figuren otros diseñadores. La única vez que participé en un colectivo eran diseñadores de primera línea".Alicia salió al paso y cortésmente le habló sobre la calidad de los otros tres creadores. El lo pensó por un momento y, dirigiéndose a Margarita Gómez, le preguntó si no sería malo que antes de él salieran tres diseñadores, pues su colección tiene 80 salidas y dura 18 minutos. Al determinar que el tiempo no sería exagerado, De la Renta llamó a Adam Lippes, director de publicidad de su firma y luego de hablar un rato les comunicó que el 26 de agosto tendrían un desfile suyo en Medellín. Después de esto todo ha sido pan comido para los organizadores de Americamoda. Ni siquiera tuvieron problemas con la llegada de Jack Alexander, asistente de De la Renta, quien seleccionó a 24 modelos : 11 paisas, 15 bogotanas y dos caleñas Dentro del grupo elegido quedaron inscritos los nombres de Claudia Elena Vásquez, Ingrid Wolff, Carolina Castro, Marcela Carrillo, Tutti Barrera, Noelle Schonwald, Bianca Arango y Geraldine Zivic, entre otras. Simultáneamente adelantan los preparativos para recibir a los otros diseñadores. El venezolano Angel Sánchez, uno de los más importantes creadores latinoamericanos de la nueva era, ganador de premios como el Gold Fashion Award de 1997, Moda Award de 1998 y New Star Award de 1999 en Miami. Sánchez traerá para esta ocasión la colección de otoño 99, fuertemente influenciada por parámetros arquitectónicos a través de cortes y entalles que contornean la silueta femenina realzándola.Por su parte la barranquillera Silvia Tcherassi, la carta colombiana en el prestigioso desfile de fin de feria, estará presente con sus fluidos trajes en los que se resaltan la limpieza del diseño y la sobriedad. Sus trajes respiran sobre la piel, han dicho de ella. Y Rubén Campos, de Chile, conocido como el arquitecto de la moda de su país, impone su propuesta creadora en toda América. Sus trajes han estado compartiendo pasarela con creaciones de grandes diseñadores como Armani, Donna Karan, Carolina Herrera, Thierri Mugler, Paco Rabanne, Doce&Gabana, entre otros. En esta ocasión mostrará su colección Glamour Neo Cuture, inspirada en el quiebre de los estereotipos tradicionales a las puertas de 2000, que recrea con líneas que se rigen por la curvatura del cuerpo. Si bien todo en Americamoda apunta a ser un suceso realmente importante en las páginas de la moda en Colombia, lo cierto es queAlicia Mejía sufre cada vez que suena el teléfono porque teme que las noticias que se exportan del país rompan el hechizo.