Fátima Florez es una de las mejores imitadoras de la vicepresidenta de Argentina Cristina Fernández de Kirchner, y, desde hace unos meses, la novia de uno de sus mayores rivales políticos: Javier Milei, el electo presidente del país, quien con un discurso basado precisamente en derrotar al kirchnerismo se convirtió, el pasado domingo, en el nuevo residente de la Casa Rosada.
Pero, mucho antes de que conquistara el corazón de Milei, Florez ya era famosa. Actriz y humorista, los argentinos la reconocen por llenar teatros en el país, principalmente con sus espectáculos humorísticos donde imita a numerosas figuras de la vida nacional. Además, ha participado de exitosos programas de TV como Periodismo para todos, conducido por Jorge Lanata, y Bailando por un sueño, con Marcelo Tinelli.
De ahí que, en campaña, cuando la invitaban a entrevistas, era común que le pidieran que hiciera una rueda de imitaciones, una tras otra. Su enorme habilidad le permite encarnar a más de una veintena de personajes, que van desde actrices y conductoras de televisión hasta políticos como la actual vicepresidenta Cristina Fernández. Otras figuras, del plano internacional, tampoco se salvan de sus imitaciones: Madonna, Shakira, Paulina Rubio y Xuxa, están entre sus personajes favoritos.
Sobre su labor, Florez aseguró en una entrevista con CNN en 2016: “Hay mucho trabajo de investigación, de concentración, de ver millones de videos para captar realmente lo que es el alma del personaje, la psicología. El color de la voz también es muy importante, los gestos, los movimientos hacen al todo del personaje”.
Alias, la “540″
Pero, fue solo hasta agosto de este año que la periodista Marina Calabró, de Argentina, en su columna en el programa Lanata sin filtro, confirmó el romance entre el candidato presidencial de ultraderecha Javier Milei y la imitadora, actriz y cantante.
Lo curioso, en ese momento, es que Milei, que acababa de ganar las primarias presidenciales de Argentina, públicamente agradeció el triunfo a su hermana, a sus perros o los hijos de cuatro patas y a la “540″, aunque pocos entendieron a qué se refería exactamente.
Pocos días después, el entonces candidato presidencial de La Libertad Avanza reconoció por primera vez en público su relación con la artista. “¡Imposible no amarla! Viva la libertad, carajo”, escribió Milei en su cuenta oficial de Twitter. En el video aparecía Fátima hablando sobre un tema culinario, la imitadora recomienda una marca de huevos para manejar su “nueva dieta proteica”.
Fátima Florez es en realidad su nombre artístico. El de pila es María Eugenia Florez, una argentina de 42 años que creció en Olivos, un barrio en las afueras de la capital argentina donde se encuentra la residencia presidencial.
Pero, la 540 era la actriz e imitadora Fátima Flórez, conocida especialmente por el programa Periodismo para todos, de Jorge Lanata.
Dicho seudónimo, según reveló en numerosas entrevistas, lo adoptó por sugerencia de su exmarido, Norberto Marcos, a quien conoció en Perú cuando fue a trabajar en 2001 y quien hasta principios de este año también era su histórico productor.
Se separaron luego de 22 años. Poco tiempo después comenzaría su romance con el presidente electo, Javier Milei.
Según contó Florez, quien siempre ha cultivado un bajo perfil sobre su vida privada, el encuentro con Milei se dio cuando coincidieron en el programa de Mirtha Legrand en diciembre de 2022. La relación se inició unos meses después, cuando ya estaba separada, según ella misma ha aclarado a los medios.
A ese mismo programa volverían, como únicos invitados, en octubre de este año, 15 días antes de las elecciones generales, en lo que fue su primera aparición pública juntos.
Los expertos en marketing político aseguran que con este romance, Milei, que se había hecho conocido como un participante excéntrico, sumó puntos y mejoró su imagen.