El Rey del Despecho, Darío Gómez, falleció este martes en la Clínica Las Américas de Medellín. El cantante de música popular llegó a la clínica sin signos vitales, tal y como lo afirma el comunicado emitido por la entidad de salud.
“Ingresó al servicio de emergencias el señor Darío de Jesús Gómez Zapata en estado de inconsciencia luego de haber sufrido un colapso súbito en su hogar”, expresó Clara Inés Gómez, gerente de comunicaciones de la clínica.
Darío Gómez vino al mundo rodeado de color verde un 6 de febrero de 1951. Al occidente de Antioquia, en la zona rural del municipio de San Jerónimo, nació el ‘Rey’, quien conquistó los corazones de los amantes de la música popular.
La vida musical y amorosa del artista no fue sencilla, pero siempre se caracterizó por ser un hombre luchador. Darío persiguió su sueño de ser cantante desde muy niño, compuso su primer tema a la corta edad de 12 años. Después de trabajar incansablemente por sus sueños, la disquera Codiscos le dio una oportunidad a finales de los setenta y junto a su hermano Heriberto Gómez grabó Los Legendarios.
Esa misma perseverancia lo acompañó en temas del amor. Sin embargo, el cantante no tuvo grandes éxitos con sus conquistas. Muchas de sus canciones están inspiradas en sus decepciones amorosas. Uno de los romances del artista que muy poco se conocen fue con ‘Giselle’, como él mismo la denominó en una entrevista.
Durante su juventud, Darío Gómez cayó enamorado por la belleza de Giselle. Una mujer oriunda de Ipiales, Nariño. Durante la época de romance, Darío confesó que realizaba un viaje de más de 20 horas para ver a la hermosa ipialeña. “Yo viajaba desde Medellín hasta Ipiales para encontrarme con ella”, dijo en una entrevista.
Desafortunadamente, toda la insistencia y el tiempo invertido en los viajes fue en vano, porque Gisel nunca quiso comprometerse con él. Aunque en esa ocasión no fue satisfactorio, una de las técnicas que Darío usaba para enamorar era dedicar canciones. Darío se sintió tan ilusionado con Giselle que le compuso la canción Por ti lo inventaría.
“Me gustas tanto desde que te conocí, que la distancia no me ha podido vencer”, “quiero hacerte feliz, mi amor vente conmigo, que hasta la eternidad serás mi compañía. Porque hasta el más allá he de llegar contigo”, escribió el ‘Rey’ en su canción.
Pero esta no fue la única historia de desamor que tuvo Darío y tampoco la más difícil. El Rey del Despecho estuvo casado en dos ocasiones. A sus 18 años de edad contrajo matrimonio con Martha Nubia Pineda. En su primer matrimonio tuvo tres hijos. Luz Dary fue la hija mayor de esa unión.
En un evento desgarrador, Luz Dary fue víctima de una bala perdida. El dolor estremeció de forma irreparable el corazón de Darío, pues Luz Dary dejó huérfana a Daniela. Por ella el artista creó una de las obras más aclamadas por los colombianos y todos sus seguidores hispanohablantes.
“Martha Nubia siempre me detestó en la música. Cuando empecé a grabar le dije yo: ‘Negra grabé por primera vez’, y lo puse y me dijo ella: ‘Oigan a este, si se siente que es artista, eso no es para cualquiera’’, confesó en una entrevista Darío Gómez.
Sin embargo, Darío Gómez agradeció haber conocido a su primera esposa. “Si no hubiera sido por ella, no me hubiera dedicado a cantarle al despecho. Yo no podía desaprovechar esas vivencias”, expresó el artista.
El último y gran amor fue Olga Lucía Arcila, su segunda esposa y con quien estuvo comprometido por más de 30 años. De ese matrimonio, Darío tuvo tres hijos más: Lady Catalina Gómez Arcila, Kelly Johana Gómez Arcila y Jorge Armando Gómez Arcila.