Romina Pérez es una gran exponente del downhill, un arriesgado estilo de bicicleta urbana que se practica saltando techos, dando giros al vacío y esquivando muros y carros. Todo esto, mientras lucha, en su barrio al sur de Bogotá, contra los hermanos Chivita, unos usureros que tienen contra las cuerdas a varios vecinos por cuenta de préstamos imposibles de pagar.
Así estaba la vida de Romina hasta que se da cuenta de que tiene una hermana gemela, Laura Vélez, fruto de un amor prohibido entre su madre y un hombre adinerado que, años atrás, le hizo creer que una de sus hijas había nacido muerta.
Esa es la historia detrás de Romina Poderosa, la novela que llegó a las noches del Canal Caracol y que cuenta con un elenco de actores de lujo que trajo de regreso a la televisión a Zharick León, la recordada actriz cartagenera que se ganó un lugar en el corazón de los colombianos con su papel de Rosario Montes en Pasión de Gavilanes.
Ahora interpreta a Virginia, una mujer de clase alta que oculta un oscuro oficio: es la cabecilla de una banda delincuencial llamada ‘La mafia del grifo’, en donde la conocen como El Don. Una mujer de sangre fría que puede dormir tranquila a pesar de las órdenes sangrientas que dicta a diario.
SEMANA conversó con la artista sobre este personaje, con el que Zharick vuelve a ser la villana de la historia: “Yo pensé que había tenido los retos más grandes de mi vida, pero nunca había interpretado un personaje como Virginia”, aseguró la también modelo.
SEMANA: En esta novela interpreta a la madre de una de las gemelas. ¿Qué de su propia experiencia como madre está colocando en este personaje?
Zharick León (Z.L.): En este personaje y en esta historia, yo creo que lo amorosa, lo dulce, lo comprensiva. Es algo que tenemos todos los padres, sobre todo las madres, tratar de ser justas siempre. Creo que eso utilicé de mí pare Virginia.
SEMANA: ¿Cómo fue retomar la actuación y volver a la televisión?
(Z.L.): No fue tanto retomar, porque ya había hecho un proyecto anterior, que de hecho también lo van a transmitir en Canal Caracol. Pero, a un personaje como Virginia sí es la primera vez que tengo la oportunidad de darle vida. Yo pensaba que otras cosas que había hecho antes, ya habían sido grandes retos de mi vida, pero Virginia me sorprendió gratamente. Retomar la televisión es la oportunidad de poder expresarme, compartir un poco mi vida, mi experiencia. Uno construye los personajes a través de cada cosa que vivimos, con cada experiencia, dolorosa, de alegría. Ha sido una experiencia muy grata.
SEMANA: ¿Cómo fue la construcción de este personaje?
Z.L.: Virginia es una mujer fuerte, por lo mismo la construcción de este personaje fue compleja. Nunca en mi vida había tenido situaciones como las que vive este personaje. Y me tocó ir al fondo. Preguntarme: ¿por qué esta persona actúa así?, ¿por qué esta persona habla así?, ¿por qué esta persona reacciona de esta manera? No es fortuito que un ser humano reaccione positiva, negativa o agresivamente. Investigué situaciones de personajes similares en nuestra sociedad, cómo actúan, cómo se enfrentan al mundo y cómo ocultan su verdadera esencia. Fue un trabajo muy interesante, un reto bien importante en mi carrera.
SEMANA: Es que hasta los villanos tienen un lado vulnerable...
Z.L.: En el caso de Virginia se trata de una mujer con una capacidad de superación extraordinaria, pero también una mujer que, como muchas otras, desarrolla capacidad de manipulación. Las mujeres somos como las reinas de la manipulación porque nos valemos de esas armas para conseguir nuestros objetivos. Ella es desconfiada, no le cree a nadie. Y todo eso lo puedo reflejar porque la novela está muy bien escrita.
SEMANA: ¿Qué referentes te han servido para tu labor como actriz y para la creación de tus personajes?
Z.L.: Hace mucho aprendí que ese no es el camino cuando construyes una vida en la actuación. No se trata de imitar, no se trata de decir: “Vi esto y lo voy a tomar”. Lo más bonito y lo más interesante, lo que más te causa orgullo y felicidad es poder se tú, desde tí mismo construir algo diferente y algo que se vea auténtico.
SEMANA: ¿Seguirá en la actuación o tomará otros caminos?
Z.L.: Tengo mucho planes. Tengo como mi plan b, un proyecto que tenía desde hace rato como cuajando y ya se han dado todas las cosas. Después de que salga de todo esto, de las promociones de “mi Romina” ya me voy a dedicar a eso. Tiene que ver con el agro, con los animales, con la naturaleza. Eso me tiene también muy contenta porque este trabajo me permitió darle vida a ese sueño.
SEMANA: ¿Cómo se conectan el agro y la actuación?
Z.L.: Toda la vida he estado super conectada con la naturaleza, lo que pasa es que no soy una persona que hable mucho de mis cosas, ni que me guste mostrar mi día a día. Yo vengo del mar, de la costa, caminando a pie descalzo, mi papá regañándome porque el pie se me iba a volver un ñame. Cuando cogía una guayaba mi papá me regaña porque había que pedirle permiso a la planta y dar gracias. Y bueno, vengo como de ese mundo con un vínculo muy grande con la naturaleza, por la forma en la que mi papá nos educó. Pero, ¿en qué se unen el agro y la actuación? Como que no hay mucho.
SEMANA: ¿Por qué no se deben perder Romina los televidentes?
Z.L.: Primero, porque está hecha con el alma. Todos los que estamos en esta producción somos unos locos apasionados y ya eso le da un toque diferente a esta historia. Segundo, contamos con unos súper directores y escritores. Y es la primera vez que estoy en un proyecto de ellos. Hay una cosa muy particular que no les puedo contar pero que es un secreto para mí: me disfruté mucho leyendo cada escena de esta historia. Cuando la leí decía: “Si yo estoy leyendo esto y está causando lo que está causando en mí, que hasta se me pararon los vellos, ¿cómo será con música, con fotografía, con la actuación, con todo lo demás? Esto va a ser la locura”. Me encanta la historia de la protagonista porque no es la típica que no mata una mosca, es un ser humano de verdad.