Las últimas semanas han sido las más difíciles en la vida de la actriz caleña Marilyn Patiño, recordada por su participación en producciones como Sin senos no hay paraíso, El auténtico Rodrigo Leal y Oye, bonita, entre otras.
Hace solo unos días, el pasado 28 de octubre, a sus 48 años y en medio de las lágrimas, le contaba al mundo del asesinato —en una extraña masacre, ocurrida en un cañaduzal ubicado en Caloto, Cauca— del padre de sus hijos, Héctor Fabián Bonilla Ulloa. Este empresario y ganadero, con quien estuvo casada por varios años, murió junto con otras tres personas.
De esa unión quedaron dos pequeños hijos, Samuel y Valentín, quien nació en España en 2019. Ambos lloran hoy la partida repentina de su padre. El día de su muerte justo cumplía 44 años, según contó la actriz. “Te llevamos en el corazón hoy en tu cumpleaños. No hay palabras para describir el dolor”, escribió en sus redes ese día.
Exiliada en Miami y alejada hace un tiempo de la televisión, confiesa que ahora está entregada de tiempo completo a sus pequeños en medio de una dura situación económica, del miedo latente y de una serie de amenazas que han puesto a prueba la fortaleza y el perrenque que le reconocen sus amigos y colegas del mundo del entretenimiento.
“Estoy durmiendo en un colchón en el piso, así estoy y no me avergüenza decirle al mundo que estoy pasando necesidades”, confiesa la actriz visiblemente acongojada.
La también cantante de música popular, que debutó como intérprete en 2022 y cuya carrera en ese campo comenzaba a despegar, denunció, además, que le robaron su apartamento y la intimidaron, por lo que no tuvo otra opción que “empezar de cero”. “No me da miedo, no tengo ni un peso, no me da pena”, asegura Marilyn.
Este complejo momento la llevó a buscar ayuda legal por medio de la firma del reconocido abogado Abelardo de la Espriella, De la Espriella Lawyers, pues la actriz denunció que la están amenazando y extorsionando después del asesinato de su exesposo.
“Marilyn Patiño no está sola, la protegeremos con todas las herramientas que nos entrega la ley, tanto en Colombia como en Estados Unidos. Así que todos esos bandidos, delincuentes y oportunistas que la están extorsionando y presionando tienen que saber que, como insistan en eso, va a caer sobre ustedes todo el peso de la ley. Están advertidos”, aseguró Abelardo de la Espriella en compañía de la actriz colombiana a través de las redes sociales.
De modelo a actriz
Atrás parecen haber quedado los días de brillo en los que Marilyn Patiño trabajó como modelo desde los 14 años y como actriz. Un sueño que persiguió desde muy joven y que la hizo empacar sus maletas de Cali a Bogotá. Quería convertirse en estrella.
Al comienzo no la tuvo fácil pese a su evidente belleza. Su pasado como modelo y su figura exuberante la encasillaban, sin proponérselo, en papeles “de la amante, de la otra, de la que pillaban en la cama, de la ‘empelotriz’, y me cansé de hacer papeles de ‘empelotriz’. Por eso, me esforcé por demostrarles a los productores de televisión que yo traía formación actoral. Que tenía la fuerza y la disciplina necesarias para hacer otro tipo de papeles. Es que llegar al medio es muy fácil, pero lo que te mantiene es la disciplina”, cuenta la actriz.
Y la oportunidad llegó. En la producción La sucursal del cielo, en 2008, interpretó a Fabiola Belalcázar, una mujer adelantada a su tiempo “y de las primeras que se rebelaron contra el sistema en los años setenta, que se divorció para no ser infeliz y maltratada. Una mujer separada en esa época era un escándalo y me siento agradecida de haber podido interpretarlo, pues me permitió mostrar otra faceta como actriz. Porque, además, por la época en que se recreaba la novela, era un personaje de carácter y dramático que me exigía salir más recatada y tapada. Eso me fue alejando de esos roles en los que me mantenían encasillada y de las personas que en su momento me hicieron la vida difícil en esta carrera de la actuación”.
Y con esa misma tenacidad dice haber construido su vida personal. Antes de que llegara a su vida su fallecido exesposo, Héctor Fabián, había tenido otra relación con el empresario Carlos Alfonso Rincón Paniagua, quien perdió la vida en un accidente.
“Pero siempre he sido una mujer de caer y levantarme. Y no lamentarme. Eso no sirve de nada. Nunca he dejado que los golpes me dobleguen. Soy de las que creen que uno debe intentarlo una y otra vez y todas las veces que sean necesarias. Y así también ha sido en el amor”, dice Marilyn.
Igual actitud asumió cuando su salud se puso a prueba por cuenta de los implantes mamarios que se puso años atrás. “Me hicieron una mala práctica. Me destrozaron los senos, yo tenía unos 23 años y es una experiencia que no le deseo a nadie. Dos meses después de la cirugía no podía despegar los brazos de mi tronco de lo mal que había quedado, el dolor fue impresionante. Fue un error que hoy asumo por no haber elegido bien al cirujano, porque otro médico me dijo que se me podían gangrenar los pezones”, cuenta la actriz.
Esa misma presión por la belleza que impone el medio artístico la llevó a refugiarse en dietas para bajar de peso. Y el desconocimiento sobre el tema cuando era joven le causó serios problemas de salud con los que lidia hasta la actualidad.
“Cuando yo tenía 18 años, estaba modelando. Entonces, en todas las agencias me decían que estaba subida de peso. Yo tenía bonita forma, pero era trozuda”, explica Marilyn.
Señala que en ese momento ella no tenía una noción clara de lo que significaba la belleza y se dejó llevar por lo que le dijo su agencia de ese tiempo.Tras esas amargas experiencias, Marilyn cuenta que comenzó un proceso de construcción de amor propio y recuperación personal. Buscó ayuda psicológica para tener también un proceso de sanación emocional.
“Mi crecimiento espiritual ha sido grande. Haber expuesto mi salud de esa manera y poder vivir para contarlo me cambió por completo”, relata la caleña. Con esa misma fortaleza interior es que espera superar esta nueva prueba que le pone la vida. “No me importa empezar de cero. De este tipo de situaciones tan duras lo único que puede pasar es que salga más fuerte que nunca”, asegura la actriz.