Pese a que su laboral durante años ha sido generar risas en miles de colombianos, la humorista Patricia Silva padeció de un trastorno mental que logró superar. La noticia de que había intentado quitarse la vida tomó por sorpresa a sus colegas y a sus seguidores. Por esto la humorista, conocida como La Monita, decidió compartir su historia por medio de una entrevista a la revista Vea.

Patricia contó que pese a tenerlo todo, una excelente carrera, una estabilidad económica óptima, se separó y pese a todos los lujos que ella menciona tener, se sentía triste y sola. “Estaba en una época formidable con mi trabajo, llena de contratos, con mi billetera bien gordita, mi carro último modelo y muy bendecida en la parte laboral y económica, pero me separé y a pesar de que yo trabajaba estaba en una de las mejores épocas de mi vida, yo me sentía triste, sola”. ‘La monita’ relató el momento en el que pensó que la solución a su tristeza era quitarse la vida. “Un día estrenando apartamento, me asomé por ese piso 11 y dije la solución a esa tristeza es quitarme la vida, lo llegué a pensar. Sentía que había algo que faltaba en mi vida. Era una tristeza infinita, una melancolía”, aseguró.

Se cree que el detonante de llegar a padecer esta enfermedad fue su separación y que ha esto, se sumo que su hijo se fuera a vivir al exterior. Hechos que le causaron profunda tristeza a la humorista. Patricia cuenta cómo acercarse a Dios le ayudó a superar este trastorno. “Comencé a buscar a Dios, esa es la verdad y Él se me reveló. La gente es incrédula y no cuento tanto detalle, pero yo le dije a Dios: “si existes mándame un buen hombre, que no beba, que no me maltrate, que sea un hombre que esté contigo”. La humorista cuenta cómo Dios contestó a su petición.

Patricia era amiga hace seis años de una niña a la que conoció, luego de diera su testimonio en el programa Yo José Gabriel. Quince días después de su petición le escribió el hermano de esa joven. Patricia asumió que se trataba de un amigo que tenía el mismo nombre que el hermano de su amiga. La humorista cayó en cuenta de que no se traba de un amigo de ella y por eso no accedió a sus invitaciones a salir. Finalmente accedió a salir con él y en su segundo encuentro “En esa segunda cita, me dijo que me casara con él, que yo era la mujer que él estaba buscando. Él tenía que ir a un viaje y se demoraba quince días y me dijo que al regresar esperaba mi respuesta y cuando él volvió nos fuimos a vivir juntos”.

Ya han pasado 17 años desde esto y Patricia argumenta sentirse bien y feliz. “No voy a decir que él es un angelito, pero sí es un hombre respetuoso, temeroso de Dios, con él me acerqué más a lo espiritual”. La humorista aclara que los episodios de depresión están presentes aún, sin embargo ella manifestó que los maneja por medio de la oración y de la lectura de la Biblia. “Más que hablar de religiones, hablo del amor de Dios”. enfatizó la humorista.

Para la fecha ya es abuela de 4 nietos. Su hijo reside en Canadá y lo visita a él y a sus nietos por lo menos una vez en el año. Aunque debido a la pandemia el año pasado y este no ha podido viajar a verlos. Patricia finalizó la entrevista contacto que hace algunos meses padeció de covid-19, sin embargo, ella quiso mantenerlo en reserva. Estuvo hospitalizada, pero no tuvo que ser ingresada a una UCI, aseguró que esto fortaleció más su búsqueda espiritual y agregó que su esposo estuvo siempre pendiente de ella, detrás de una pantalla.