Como abrebocas a una entrevista que emitirá entera el domingo, la cadena ABC lanzó apartes que dan una idea de lo mucho que compartió Michelle Obama, ex primera dama de Estados Unidos entre 2009 y 2017. Obama accedió a contar recuerdos profundos y dolorosos, y reacciones a los hechos importantes de su país y el mundo en el marco del lanzamiento de su libro biográfico Becoming, que sale a la venta al público el martes 13 de noviembre. En efecto, la carismática abogada graduada de Harvard, ex primera dama, activista, madre, esposa, escritora, productora audiovisual -y mucho más- tocó un tema muy personal. Reveló que hace unos 20 años sufrió de un aborto involuntario, y que esto la llevó a pensar que había fallado. “No sabía qué tan común era que sucediera algo así, de eso no se hablaba. Nos quedamos en nuestro propio dolor, pensando que de alguna manera estamos rotos”. En efecto, confesó que durante esos duros días se sintió sola Le recomendamos: Barack y Michelle Obama firman acuerdo para publicar libros Eso, sin embargo, no le quitó las ganas de ser madre. Un tiempo después, ya de 34 o 35 años, pensó que la mejor opción sería la inseminación artificial, opción que funcionó bien ambas veces. La hoy madre de dos hijas (Sasha, de 17 y Malia, de 20) no ha bajado el ritmo desde que salió de la Casa Blanca, dedicada a este libro y también a gestionar lo que será el lucrativo contrato que ella y su marido tienen con Netflix. En el libro, y quizás también la entrevista de la ABC, Michelle también aborda las crisis matrimoniales que produjeron la llegada de Barack a la arena política. Relata su camino desde los barrios de Chicago a la Casa Blanca, donde, asegura, vivió el racismo en carne propia. Michelle no se guarda las críticas a Trump, como candidato matón que por años sembró dudas sobre el lugar de nacimiento de su marido Barack, y que matoneó a su rival Hillary Clinton.