No hay familia normal: las hay felices, tristes, quebradas, unidas, pero usualmente en todas hay un mezcla de alegrías y depresiones. Por eso, de cierta manera, una familia es todas las familias. No en todas se habla de algo tan terrible como un abuso sexual, pero, cuando llega una crisis fuerte, la mayoría de familias se fragmenta. Esa división afecta a los adultos que la promueven (conscientemente o no) y a los niños, víctimas del fuego cruzado.La historia de la familia Farrow y de Woody Allen es compleja. Aquí unos datos clave: el famoso director de cine está hoy casado con Soon Yi Previn -la conoció de veinte años-, hija adoptiva de Mia Farrow, una mujer con la cual tuvo una relación de 12 años. Como es comprensible, Mia jamás le perdonó esa traición a ninguno de los dos. Y las repercusiones de ese desgarro están en el centro de un conflicto que estalló como una traición y escaló, en 1992, cuando Mia Farrow y la pediatra de la pequeña Dylan Farrow acusaron a Allen de haber abusado sexualmente de ella.En 2014, poco después de que Woody Allen recibiera un Globo de Oro a su trayectoria, Dylan Farrow escribió -a sus 28 años- una carta abierta describiendo el abuso sexual del que argumenta haber sido víctima. Un par de años después, en otra carta abierta su hermano Ronan acusó a los medios y a toda la industria del entretenimiento de doble moral por ignorar el relato y seguir venerando y dando trabajo a Woody Allen. Hoy, Ronan es un periodista celebre de NBC y The New Yorker. Destapó parcialmente el escándalo ‘Harvey Weinstein’ y vive su mejor momento profesional. Ha sido objeto de entrevistas con Christiane Amanpour en CNN, habla con fluidez de los abusos a mujeres y también de la política internacional de su país, y su credibilidad y rigor parecen cada vez más robustos. Esto ha tenido efecto en su causa familiar. Desde finales de 2017, actores y actrices de Hollywood empezaron a denunciar a Woody Allen, asegurando que no volverían a trabajar con él, que había sido una vergüenza habr trabajado con él e ignorar por tanto tiempo la voz de Dylan.Nueva vozParecía cuestión de tiempo antes de que algo sucediera, una caída cataclísmica como la de Harvey Weinstein, pero no pasó. El actor Alec Baldwin salió en defensa de Allen haciendo mención a las dos investigaciones de las que fue objeto (para corroborar o no el abuso), y en las cuales fue absuelto. Además, surgió una voz con mucho más peso en la discusión que hasta venía silente en el desmoronamiento de aquello que alguna vez fue una familia.Moses Farrow, el hermano mayor que compartió infancia con Ronan y Dylan cuando Allen y Mia eran pareja, escribió una franca y extensa carta que tituló “Un hijo habla”, en la que defiende a su padre y lanza puyas tremendas contra Mia Farrow. Moses pone de presente las investigaciones que ya mencionaba Baldwin, y, ante todo, se pone en el día y lugar donde Mia Farrow y su hija aseguran que tuvo lugar el abuso. Asegura que su madre le había encargado estar pendiente, cuidadoso, asegura que había tanta gente en esa casa ese día (como él, en ‘preaviso vigilante’) que el solo hecho de intentarlo era absurdo. También hace mención del ático que describe su hermanita, el tren de juguete que describe en su carta, y asegura que ese lugar estaba lleno de polvo, viejos vestidos y trampas para ratas, y que no había trencito de juguete.Menciona también que desde su propia profesión de psicoteraputa entiende que ser un abuador sexual de niños no aparece y desaparece en un día. Asegura que toda la ola contra su padre Woody Allen no es más que una campaña de desprestigio terrible que tiene una artífice por sobre todas las cosas: su madre Mía Farrow.  Moses la describe como una mujer de carácter duro, que los involucró en su propio dolor, en su propia lucha por ganar la custodia de todos y en el proceso hacer de Allen un demonio, uno que él no vio. Que lo golpeaba cada vez que osaba contradecir una de sus indicaciones, palabras. Menciona cómo el desequilibrio ha sido una constante en la familia de Mia Farrow, e incluso en su propia vida sentimental. Menciona que otros hijos de Mia se suicidaron, así como uno de sus hermanos.Pasaron dos días y Ronan Farrow habló en su cuenta de Twitter. Dijo que se trataba, como siempre, de un intento de desvirtuar a su hermana por medio de su madre, que nada había cambiado. Añadió que su padre le había ofrecido pagarle la universidad si cambiaba de bando...Lo único cierto es que algo cambió esta semana. Woody tiene un Farrow de su lado.