Si hay un cantante de música popular que ha sabido aprovechar su fama y, a partir de ello, darse a conocer a nivel nacional e internacional ganando más terreno en su industria, es el artista Yeison Jiménez. Con 31 años, el caldense cuenta con millones de seguidores, ha aparecido en la televisión y sigue creando éxitos musicales.

Jiménez ha contado en diversos momentos que, antes de ser el reconocido cantante que es ahora, trabajaba en otros oficios. De hecho, el hombre explicó que con poca edad laboró en Corabastos y, aunque muchos no creyeron en él, su sueño de ser compositor se hizo realidad.

Mientras hablaba de su más reciente sencillo, De pura rabia, en una reciente entrevista para SuperLike, del Canal RCN, el reconocido artista contó algunos detalles y anécdotas de lo que tuvo que sufrir cuando su situación económica era limitada y tenía algunas complicaciones.

“Vengo con un tema popular donde regreso, no solo a las raíces de Yeison Jiménez, sino a las raíces de lo que es nuestro género, elevado a los sonidos de hoy en día”, señaló el reconocido artista al medio mencionado.

También aprovechó para recordar los inicios en su carrera musical en cuanto a su situación económica, de esos años en los que no había mucho dinero para empezar a cumplir esos sueños que hoy son una realidad.

“Yo lo que más recuerdo es que me demoré un año y medio para poder grabar mi primer video; entonces tenía una canción que estaba muy pegada en el Eje Cafetero que se llama Te voy a olvidar -estrenada en 2011-, y cuando me hacían entrevistas me decían, ¿cuándo vamos a poder disfrutar del video?, y yo, muy pronto, pero no tenía ni un peso para grabar. Cuando empecé a ver la oportunidad de hacer el video de esa canción, dije ‘lo voy hacer en grande’, e hice un video que nadie se esperaba con carros, con modelos, con bailarinas”, manifestó Jiménez.

El artista de música popular añadió que para ese video se exigió bastante, revelando además una curiosa anécdota al realizarlo.

“Resulta que nos cobraban como 300 mil pesos por pegar unas cartulinas en una pared grandisíma, porque la idea era un taller de carros, las paredes estaban sucias, entonces dijimos hagamos una especie de ajedrez, blanco, negro, blanco, cuando yo llegué a las 8:30 de la mañana con una resma de cartulina, cogí unas escaleras y las empecé a pegar...”, manifestó. Además, añadió que cuando llegó el productor a dicha locación no creía que él fuera el cantante: “sí, él es el artista; está pegando las cartulinas, ya se baja, y creo que era para ahorrarme esa plata”.

Es así como, luego de tomar conciencia, el caldense aseguró haber edificado un “imperio” con el dinero que le sobraba en el tiempo que trabajó de cotero y cargando bultos, en la popular plaza de mercado.

Muchos pensarán que el exjurado de Yo me llamo necesitaba de mucho capital para ahorrar, pero no fue así: “Yo hice un imperio ahorrando de a 1.000 pesos, porque era lo único que me quedaba a diario. Guardaba los billetes debajo del colchón y recogía un millón de pesos”, confesó Jiménez en un pódcast Inversionistas al desnudo.

Pero lo que más llama la atención era el uso que Yeison le daba a ese dinero. Según las declaraciones del hombre, él pagaba horas de grabación para condensar sus primeros éxitos, que luego de varios intentos pasaron a escucharse en radio.

Sin embargo, el reconocido exponente del género popular no aclaró en cuántos días acumulaba el monto de dinero, que representa el salario mínimo actual en Colombia.

Jiménez sigue trabajando y construyendo sus proyectos artísticos y personales.