Paola Turbay es una de las actrices con más recorrido en la televisión colombiana e incluso hasta en Hollywood, con roles icónicos que la han llevado a adquirir una experiencia inigualable, pero sin duda, su último proyecto en Ana de Nadie no solo le ha robado el corazón, sino que también logró reivindicar muchos aspectos de las mujeres entre los 40 y los 60 años, convirtiéndose en todo un ejemplo para las mujeres colombianas.
La celebridad también fue elegida como Virreina Universal del certamen mundial de la belleza en 1992, destacando por su físico, su carisma y su personalidad, pese a que muchos aseguraron que debió quedarse con la corona. A su vez, ha sido presentadora, modelo y actriz.
Con su papel estelar de Ana Ocampo en la novela que domina la ‘parada’ en televisión, marcó su regresó a la actuación en Colombia, ya que estuvo una larga temporada en Estados Unidos, también trabajando para varios proyectos como The Closer, True Blood y estelarizó en Cane.
Pues bien, las grabaciones de los últimos de la novela, historia original llamada Señora Isabel, y en su cierre de oro, Paola Turbay fue la encargada de dar unas palabras en el almuerzo de despedida que la producción realizó en ese momento. Allí, en compañía de sus compañeros actores y de todo el equipo que está detrás de Ana de Nadie, la también presentadora abrió su corazón para expresar su agradecimiento por el recibimiento que ha tenido el personaje, según reseñó la revista Vea.
“Lo más importante de ‘Ana de Nadie’ es la manera en que todo el mundo ha conectado… Se volvió un tema de conversación, todos los días a donde yo voy la gente dice Ana, es la historia de mi mamá, la historia de mi hermana…”, dijo en un principio la bogotana.
A su vez, agregó: “Muy pocas veces se alinean los planetas para que todo resulte y tener la fortuna de participar es una bendición para todos…no solo para mí…”, señaló la exreina, resaltando el trabajo de todo el equipo: “Todo fue tan bonito y tan perfecto”.
Mientras Paola seguía inspiraba en su discurso, confesó un difícil momento que tuvo que atravesar y que incluso le afectó interpretando a la protagonista de la novela.
“Para mí personalmente ha sido el regalo más grande que me ha dado la vida… estas historias hacen catarsis… yo puedo parecer la mujer de la vida perfecta… (pero) a mí me ha tocado comérmela toda, pasar crisis, sufrir, he pasado crisis… he tenido crisis en mi matrimonio con mis hijos…”, expresó con la voz entrecortada.
Luego, concluyó: “Agradezco a ustedes haberme llamado, habían podido llamar a cualquiera... Nunca los voy a olvidar… los voy a llevar por siempre en el corazón y en el alma...”, para ser aplaudida por todo sus compañeros de set.
Por otra parte, la actriz, junto a sus dos secuaces que hicieron las veces de mejores amigas de su personaje, Adriana Arango y Adriana Romero, se fue de juerga con todo el equipo de producción, en una velada que inició con una cena muy formal y tranquila, para luego darle paso a un bailoteo digno de la Feria de Cali, pues la salsa fue lo que primero sonó y obviamente puso a bailar a Turbay, a las Adrianas y al resto de invitados.
Fue Arango quien mostró la mayoría de las imágenes de la celebración a través de sus historias de Instagram, donde no solo se ve a Turbay bailando la mítica Aguanilé de Héctor Lavoe, sino también a los asistentes de dirección, maquillistas, encargados de escenografía, camarógrafos y demás personas pertenecientes al staff de la novela que dejaron finalmente sus herramientas para disfrutar de la última vez que estarán todos juntos en un mismo recinto.
Entrada la noche y las botellas de tequila empezando a mermar, las actrices dejaron salir todo su arsenal de fiesta, no solo demostrando sus dotes para el baile, sino también destilando sentimientos con canciones despechadas de una de las cantantes colombianas más exitosas actualmente: Karol G. Canciones como 200 copas sonaron en plena celebración y las actrices laas cantaron a pulmón herido; sin embargo, la actriz Rami Herrera les salió adelante con su “tusa” y se robó el ‘show’.
Pero luego vendría el desquite para Paola, quien al ritmo de la mítica TQG de la paisa junto a la gran Shakira, dejó ver sus movimientos sensuales y atinó a cantar de forma precisa algunas de las frases de la canción, pues la verdad es que Turbay no se la sabe, pero ya está haciendo la tarea para en un futuro poderla cantar completa y sin errores.
Después vino el momento de Arango y sus seis tequilas haciendo de las suyas en su organismo. Tal como se vio en uno de los clips que publicó, ella se disfrutó como toda una rockera el famosísimo Lamento boliviano de los Enanitos Verdes, para luego darle paso una vez más al “perreo intenso a poca luz” con canciones de Feid, Sech y más exponentes actuales del reguetón.