Piter Alberiro es uno de los humoristas colombianos más reconocidos en la actualidad; a lo largo de varios años, ha trabajado en su carrera y cautivado a un público a nivel nacional e internacional, adquiriendo sumas de dinero por sus shows y presentaciones que le han permitido tener un buen nivel de vida.
Además, es empresario en Estados Unidos. Allí abrió un negocio de renta de vehículos para turistas, al cual pertenecen cientos de ejemplares de diversas marcas. También tiene restaurantes en ese mismo país.
En entrevista con Jhovanoty para Lo que dure el vuelo, Piter Albeiro confesó que, hasta el momento, su empresa cuenta con más de 185 vehículos que son rentados en ciudades importantes del país norteamericano.
Sin embargo, hizo una revelación que dejó sorprendido a su colega, pues indicó que hace algún tiempo fue víctima de robo a las afueras de su vivienda, ya que unos delincuentes se llevaron su lujoso Lamborghini.
“El lambo me lo robaron al frente de mi casa en Estados Unidos. Llegaron a mi casa, lo prendieron y se lo llevaron un domingo a las 4 de la mañana (…) Habían bloqueado el wifi para que no viéramos, entonces en las cámaras el carro estaba y luego no; desapareció, pues da cagada y todo, pero bueno, eso tiene seguro”, afirmó.
Posteriormente, Piter afirmó que se comunicó con la policía, se revisaron las cámaras y se abrió la respectiva investigación, pero no se logró identificar a los responsables. Sin embargo, el seguro cumplió su función y realizó el correspondiente pago al comediante.
“Por el carro me dieron 285 mil dólares, aproximadamente 1.200 millones de pesos colombianos, porque era lo que costaba en el momento, para el valor del mercado”.
Pese a la amarga situación que vivió en su momento, Piter Albeiro tomó la situación como una motivación para seguir luchando por su sueño y adquirir otros coches que siempre había deseado tener.
“Ese día dije: me robaron uno, ahora me voy a comprar siete, y me compré el McClaren 570, luego me compré un Maserati, una camioneta superlinda que quería para la casa, después de eso me compré el Ferrari 488, luego el Rolls-Royce y después me compré el Bentley, todos son convertibles, menos la camioneta”, indicó frente a las cámaras del programa digital.
No obstante, afirmó que, aunque se considera un amante de los carros de lujo, por el momento, no piensa invertir más dinero en ellos, pues ha preferido destinar su dinero a otros negocios que le generan una buena rentabilidad y crecimiento económico.
“Los que parqueo en frente de la casa son cinco, yo quería tener siete, pero ya me arrepentí porque no los estoy utilizando como quisiera y porque prefería invertirlo en restaurantes. Tengo unos restaurantes que me producen y a veces me da pesar porque tengo un carro que no he utilizado esta semana y yo quería tener uno para cada día”, finalizó.