La sonrisa de Lady Di regresa a los jardines del palacio de Kensington, en Londres. Por iniciativa de sus hijos, los príncipes Guillermo y Enrique de Gales, una estatua se levantará en su honor para destacar el impacto positivo que tuvo sobre Reino Unido y el mundo, y para conmemorar los 20 años del trágico accidente automovilístico en el que pereció. La hermana de la princesa, lady Sarah McCorquodale, y un comité de cinco personas más elegirán al artista que realizará la obra. Este monumento es el cuarto que conmemora a la inolvidable Lady Di en Londres, y si bien despertó polémica pues para muchos es un gasto innecesario, no tiene marcha atrás. La escultura estará lista el próximo verano.