Mientras Nicolas Sarkozy era presidente de Francia, su esposa, la modelo y cantante Carla Bruni, tuvo que renunciar a los escenarios. Solo aparecía en público en calidad de primera dama, por lo que sus seguidores pasaron años sin verla cantar en vivo. Pero ahora por fin le llegó su turno: después de varios meses promocionando su último álbum en Francia, la italiana se va de gira por Estados Unidos y Canadá. Como buen esposo, Sarkozy la acompañará en esta nueva aventura. Los papeles se han invertido y el expresidente parece estar encantado con la idea: “Sinceramente ella se ha pasado casi cinco años apoyándome. Yo también puedo ayudarla durante unos meses”, dijo. En todo caso, Bruni no ha tenido problemas para retomar su papel de cantante y sigue siendo tan popular como siempre: además del tour, grabará un programa sobre la música francesa para la emisora británica BBC 2.