Sebastián Martínez ha enamorado a los colombianos con personajes tan memorables y cómicos como los que ha realizado en proyectos televisivos como Padres e hijos, Rosario Tijeras, Allá te espero, Pa’ quererte y Hasta que la plata nos separe; sin embargo, también ha logrado deslumbrar con su gran personalidad sencilla y divertida que a diario muestra a través de sus redes sociales.
Es específicamente en su cuenta de Instagram donde Sebastián no solo muestra los pormenores de sus roles en series y novelas, también le permite a sus más de 4 millones de seguidores ver el interior de su hogar y todo lo que disfruta de estar en contacto con la naturaleza. El campo es el que recarga las energías de este paisa, que está próximo a estrenar la segunda temporada de Pálpito, serie de Netflix que tuvo muy buena acogida en 2022.
Precisamente, en territorio rural, Sebastián está llevando a cabo un proyecto personal que implica la construcción de varios espacios que requieren de su respectivo urbanismo. Esto implica la fabricación de forma artesanal de algunos artefactos, actividad que necesita de muchas manos para poder ser llevada a cabo en su totalidad; por eso Martínez no dudó un solo segundo para recurrir a una de sus personas favoritas en el mundo.
Se trata de su esposa, la también actriz Kathy Saénz, con quien se conoció cuando actuaron en la novela Juegos Prohibidos y fue allí donde surgió el amor. Este romance en principio estuvo rodeado de una gran polémica, pues la bogotana es 11 años mayor que el antioqueño y en la primera década de los 2000 esto aún era un tabú a nivel nacional.
Sebastián le pidió a Kathy que dejara de lado sus ‘looks fashionistas’ y se pusiera las botas pantaneras de plástico para que por favor le ayudara a rellenar unas bolsas de tierra, que deben quedar a la medida y de forma muy precisa para poder seguir con la construcción del espacio que Martínez está patrocinando.
Kathy aceptó encantada y con mucho amor se puso el atuendo perfecto para sentarse en el piso. Como cualquier trabajador, empezó a hacer su labor, pero con lo que no contaba era que Sebastián se convertiría en todo un capataz para supervisar la obra de forma detallada e incisiva, haciéndole control de calidad a todas las bolsas que no solo Saénz llevaba de tierra, sino las demás personas que están trabajando en el proyecto.
En las historias de Instagram del paisa se puede ver cuando el actor cambia su tono de voz y, como si se tratara de una trabajadora extraña, le pide la producción a Kathy para inspeccionar que todo haya quedado a las mil maravillas, resaltando la exactitud y la pulcritud del trabajo de la actriz, quien sonríe muy orgullosa tratando de ocultar la risa al ver a su esposo haciendo las pilatunas que aún la mantienen enamorada.
Aunque Sebastián no contó más a profundidad sobre este proyecto, sí deja ver que le llena el alma y el corazón. Al parecer, se trata de algo que va a dar muy buenos frutos no solo para él, sino para los residentes en el lugar, quienes también están trabajando hombro a hombro con el actor para materializar los sueños del intérprete.
Sebastián no solo invierte su tiempo en estudiar los libretos con las líneas de sus personajes o en sus proyectos ecológicos en el campo, también le saca tiempo al proyecto personal y deportivo de su hijo Amador, quien es corredor de Karts y hace poco estuvo en Estados Unidos, específicamente en Orlando, fogueándose con otros pilotos internacionales, en una carrera donde quedó en la posición 17 de 30 competidores, un resultado favorable para el joven en su primera carrera fuera de Colombia.
Martínez se mostró muy emocionado con la competencia de su hijo y lo apoyó de inicio a fin, mostrándole a sus seguidores lo mejores momentos del circuito.