La carta astral es un mapa de ruta celestial que tiene cada uno de los individuos. De ahí la importancia de saber el día y la hora exacta en la que se nació para saber a ciencia cierta cómo estaban dispuestos los astros en ese momento y la influencia de ellos en cada uno de los aspectos de la vida.
¿Para qué sirve la carta astral?
Es una de las mejores herramientas de autoconocimiento que se tienen a la mano. A través de ella se puede conocer y profundizar acerca del temperamento de las personas, del comportamiento innato de los individuos y de los rasgos psicológicos particulares.
La carta astral sirve para conocer las fortalezas y debilidades de las personas para que de esta forma puedan aprovechar mejor sus capacidades.
Este mapa astrológico se puede convertir en la mejor guía para saber cuál puede ser la mejor forma de organizarse en la vida y así potencializar las fortalezas que se tienen. Es así como a través de ella se pueden determinar aspectos claves de la vida como lo son los hijos que se van a tener; los afectos; la salud, las asociaciones que se harán a lo largo de la vida;, los cambios trascendentales que se vivirán; la profesión que más conviene; las proyecciones social y profesional y las amistades que se formarán, entre muchos otros aspectos.
¿Qué es el punto de la fortuna en la carta astral?
El punto de la fortuna es una entidad astrológica enigmática que se encuentra en la intersección imaginaria entre la Luna, el Sol y el ascendente en la carta astral.
En el sitio Los Arcanos, se explica que los astrólogos calculan este punto específico mediante una fórmula matemática que involucra la posición de estos tres elementos fundamentales.
Es importante porque marca la buena fortuna, la prosperidad y el equilibrio en la vida de un individuo. Es así, como la combinación de estos tres elementos sugiere un momento cósmico especial, donde la energía de la Luna (emociones e intuición), el Sol (identidad y propósito) y el ascendente (imagen pública y proyección personal) están alineados de manera armoniosa.
Este concepto tiene sus raíces en la astrología antigua, para la cual la Luna, el Sol y el ascendente representan aspectos esenciales de la personalidad y el destino.
Este punto funciona de manera diferente para cada persona, por lo que tiene diferentes significados. Para algunos expertos, es símbolo de oportunidades, porque indica momentos propicios para tomar decisiones importantes o emprender nuevos proyectos, mientras que otros lo ven como un recordatorio de la necesidad de equilibrar las emociones, la identidad y la imagen pública para alcanzar la plenitud.
Finalmente, hay que recordar que no es un punto estático, por lo que se va transformando a lo largo del tiempo, por lo que puede proporcionar importantes pistas sobre lo que depara el futuro.
Este punto, en constante cambio, se convierte, en un aliado celestial que guía a los individuos a lo largo de su existencia..