Con un analgésico y tres antibióticos inició la intervención quirúrgica que pretende reparar las fracturas que tiene Valentino, el equino que fue rescatado por el cantante Jhonny Rivera en las carreteras del Cauca. Nueve profesionales de la Universidad CES de Medellín pusieron sus manos sobre el animal durante más de cinco horas.
A las nueve y media de la mañana de este jueves el caballo de diez meses entró al quirófano. En la puerta le aplicaron la anestesia que lo tumbó sobre unas almohadas donde lo esperaban los brazos de las personas que anhelan devolverle la calidad de vida, arrebatada desde hace tres meses por un accidente de tránsito que le dobló los huesos.
Un gancho mecánico lo llevó desde el ingreso de la sala hasta la camilla. Tal como ocurre desde que el cantante anunció su rescate en las redes sociales, las luces se enfocaron en el animal que está cargado de temple porque el dolor que padeció pudo haberle provocado la muerte. Justamente, el sustantivo con el que lo bautizaron hace alusión a la valentía.
La bendición que se echó uno de los médicos veterinarios dio cuenta de que ya no había reversa: el equino estaba dopado sobre la mesa quirúrgica a la espera de que le abrieran su pata para reconstruir los estragos que le causó un camión en las inmediaciones del municipio de Bolívar, donde lo encontró Rivera mientras cojeaba por la lesión.
“Dentro de la atención médica encontramos a un paciente con una deformidad en su miembro anterior izquierdo. Lo que sucedió es que un camión iba por la carretera, Valentino iba con su mamá, y el camión lo atropella. Encontramos a un paciente de una condición corporal baja y anémico”, detalló Salomón Armel, especialista de cabecera.
El cantante de música popular tomó la decisión de trasladarlo desde Cauca hacia Pereira en un recorrido que tardó 12 horas. Tras pedir apoyo para atender las heridas de su nuevo equino, en el camino aparecieron personas que le impulsaron el milagro: en Medellín estaban las condiciones técnicas y los profesionales para acomodarle el pie.
Luego empezó la travesía desde la capital de Risaralda hacia el Valle de Aburrá. Durante ocho horas el caballo estuvo tendido en la parte trasera de un carro. Lo recibieron en el Centro de Veterinario y Zootecnia de la Universidad CES el primero de septiembre. En ocho días lo mimaron más de 15 médicos y auxiliares de la institución.
Después de barajar todas las posibilidades que había sobre la mesa, el equipo de expertos optó por realizar una intervención que tiene el objetivo de poner en el puesto su mano derecha. El plan lo pusieron en marcha tres cirujanos ortopedistas, médicos veterinarios, instrumentadores quirúrgicos, rotantes, anestesiólogos y auxiliares.
El mando lo tenía el doctor Diego Duque. Él se hizo en el lado derecho de la camilla y, junto a otras dos personas, tomaron las herramientas para empezar el proceso. Cuando inició la intervención, en el fondo se escuchó una canción del hijo de Jhonny Rivera y unas palabras que enviaron desde las montañas del departamento de Risaralda.
“Quiero hacerles llegar un mensaje a los cirujanos y a toda la gente de la Universidad CES que se han puesto la diez con este tema. Les mando un abrazo gigante y toda mi energía positiva. Que todo salga bien con la ayuda de Dios. Estoy muy pendiente con todos muy seguidores”, anunció el cantante en los primeros minutos de la cirugía.
El resto del tiempo dentro del quirófano fue intenso. El sudor empezó a brotar desde los rostros de los médicos mientras las manos estaban puestas sobre Valentino. Una vez levantaron las pinzas y cerraron la herida, el reloj empezó a correr para que se parara por sus propios medios en un espacio cubierto por almohadas.
A diferencia de los humanos, el equino no tendrá la posibilidad de sentarse en una silla de ruedas o utilizar muletas para gestionar su recuperación. En las próximas horas deberá apoyarse en la mano intervenida. En dado caso de que no dé resultados, se podría instalar una prótesis para que vuelva a trotar como lo hizo en sus primeros siete meses de vida.