Shakira dejó sin palabras a millones de personas en el mundo con el inesperado giro que le dio a su realidad, pasando la página con respecto a su vida personal para enfocarse en lo profesional. La barranquillera hizo su proceso interno, sanando las heridas que le quedaron tras la ruptura con Gerard Piqué.
La colombiana, en todo momento, intentó guardar silencio y conservar su postura lejos de las polémicas, concentrándose puntualmente en sus dos hijos, Milan y Sasha. De hecho, la cantante únicamente le concedió entrevistas a ciertos medios, abriendo las puertas de su corazón ante el dolor que sintió.
Shakira fue contundente en sus declaraciones, explicando cómo su realidad se derrumbó cuando la relación amorosa con Piqué terminó mal, tomando caminos distintos y partiendo por rumbos contrarios. Su comunicación se fracturó y ambos acudieron a los ámbitos legales para organizar el tema de las custodias y un acuerdo que firmarían para pasar los tiempos libres con sus niños.
Aunque mucho se especuló al respecto, Shakira decidió romper el silencio y contar la verdad detrás de los planes que tenía con el empresario antes de terminar su relación. La intérprete de Copa vacía afirmó que las cosas se habían hablado al interior de su vínculo, pero el año 2022 fue el escenario para que todo cambiara de manera radical.
De acuerdo con lo que se conoció, la celebridad dialogó con Rolling Stone y puntualizó en las ideas que rondaban alrededor de su unión con el español. En la charla fue precisa en que habían acordado mudarse de Barcelona, a raíz de que sus proyectos se enfocaban en terrenos muy diferentes.
En primer lugar, Shakira destapó que ya era un hecho que Gerard se despediría de la industria del fútbol, por lo que sus planes eran trasladarse a Estados Unidos para criar a sus hijos y así ella emprender, de nuevo, la carrera en la que trabajó por tanto tiempo.
Sin embargo, lo lamentable ocurrió y su relación terminó muy mal a mitad de 2022, cortando por completo estos proyectos que se pusieron sobre la mesa en algún momento. A pesar de que ella lo respaldó y puso en pausa su profesión, sabía que su vida estaba lejos de Barcelona.
“El estar en Barcelona fue un gran sacrificio para mí y para mi carrera. Era difícil mantener esa continuidad. Era complicadísimo llevar gente a Barcelona. Cada vez que quería hacer una sesión, tenía que planificarla con meses de antelación”, comentó al inicio.
“El plan siempre fue que, cuando mi ex se retirara del fútbol profesional, nos iríamos a vivir a Estados Unidos y terminaríamos de criar a nuestros hijos allá, por todo el sacrificio que yo había hecho todos esos años acompañándole a jugar. La idea era venir aquí, pero ese momento coincidió justo con la separación”, agregó.
Para concluir este punto enfocado en aquellos sueños que tenía para su futuro, Shakira indicó que al final de todo sí se volvió realidad lo que tenía en mente, pero de una forma muy distinta. La aparición de Clara Chía en la ‘ecuación’ transformó las situaciones y no se hicieron posibles estos anhelos.
“Al final, los planes sí se vuelven realidad, solo que en diferentes maneras”, mencionó.