En todos los rincones de Colombia hay niños, jóvenes y adultos que hacen música. Así lo evidencian las más de 600 escuelas municipales de música y las decenas de festivales de todos los géneros que se celebran en el país. No obstante, son pocas las personas dedicadas a la reparación y el mantenimiento de instrumentos, principalmente de los denominados “sinfónicos”. Ante esa necesidad, la Fundación Salvi, en alianza con la Fundación Fanny y Luis Carlos Sarmiento, trabajan en el desarrollo del proyecto Centros de Mantenimiento y Reparación de Instrumentos Musicales, a través del cual las personas e instituciones vinculadas con la música pueden disponer de servicios confiables para sus instrumentos de cuerda frotada, como violines, violas y violonchelos, y de viento, como clarinetes, flautas, oboes, trompetas y cornos. Los centros se encuentran ubicados en Bogotá, Ibagué, Cartagena, Medellín, Popayán y Cali. Disponen de instalaciones debidamente acondicionadas y han vinculado a un equipo de luthiers especializados. Durante el 2012 se llevaron a cabo talleres y seminarios sobre construcción y mejoramiento acústico de violines, orientados por el luthier italiano Fabrizio Di Pietrantonio y el maestro colombiano José Luis España. Allí se exploraron las posibilidades de optimizar las cualidades sonoras de algunos instrumentos. Igualmente, con el experto brasileño Daniel Tamborin se estudiaron nuevas técnicas para la reparación de instrumentos de viento como clarinetes, flautas y saxofones. El proyecto cuenta también con el apoyo de la Asociación Italiana de Constructores de Instrumentos Acústicos (ACISA). Gracias a esa entidad, las obras de constructores como Antonio Stradivarius son conocidas en casi todos los rincones del planeta. ACISA también se encuentra diseñando un programa de formación profesional en luthería. El programa se impartirá en el Conservatorio del Tolima. Para el trabajo en cada una de las ciudades donde operan los centros, se celebraron alianzas con entidades locales de reconocida experiencia, como las escuelas taller de Bogotá, Cartagena y Popayán, el Conservatorio del Tolima y la Fundación Proartes de Cali. En esas ciudades, lo mismo que en Medellín, pueden acudir los estudiantes, músicos o entidades para obtener diagnósticos, reparación y mantenimiento de sus instrumentos. Los Centros de Mantenimiento y Reparación de Instrumentos Musicales también tendrán un espacio en el Cartagena Festival Internacional de Música a través de dos “clínicas”, donde se atenderán instrumentos de cuerdas frotadas y viento. Igualmente, se realizarán talleres en los que los interesados aprenderán a construir tambores y gaitas tradicionales de la región Caribe, y charlas pedagógicas sobre la anatomía, el funcionamiento y el mantenimiento de instrumentos. El Festival 2013 también servirá de marco para la presentación oficial de este proyecto. Entrevista con Fanny Gutiérrez de Sarmiento Semana.com: De los programas que lidera y apoya la Fundación Salvi, ¿por qué llamó más su atención el proyecto de Centros de Reparación y Mantenimiento de Instrumentos? Fanny Gutiérrez de Sarmiento: Porque, aunque es una obra tal vez menos glamorosa que otros aspectos de la música, lo cierto es que sin instrumentos adecuados para transmitirla, no sería posible el gozo de la música como debe apreciarse. Nuestro apoyo consistirá en financiar y supervisar los programas de mantenimiento y arreglo de instrumentos musicales de cuerda y viento. Esta labor se llevará a cabo en los talleres escuelas que operarán en diferentes áreas del país. Semana.com: Usted va a apoyar un centro de instrumentos. ¿Cuál es su instrumento favorito? Fanny Gutiérrez de Sarmiento: Me gusta mucho la música de cuerda, una guitarra acústica bien tocada me encanta. Pero igualmente los instrumentos de viento son tan llenadores: ¡Nada como un espectacular saxofón! Semana.com: ¿Cómo se imagina estos centros y qué función cree que deben cumplir? Fanny Gutiérrez de Sarmiento: Los imagino como lugares profesionales y dinámicos en donde la creatividad y la dedicación serán el motor que los impulse. Su función será hacer posible el verdadero gozo de la música en todos los rincones de Colombia. Semana.com: ¿Cree que el Cartagena Festival Internacional de Música ha ocasionado un impacto significativo en la cultural y en el turismo de Colombia? Fanny Gutiérrez de Sarmiento: No me cabe duda. En mi opinión, el Festival ha posicionado a Colombia en el mapa musical mundial y eso, desde luego, atrae enormemente al turismo. Y quizás más importante, creo que el Festival ha permitido la realización de muchos sueños musicales de los colombianos. Semana.com: ¿Cómo deben contribuir las instituciones o personas a la cultura del país? Fanny Gutiérrez de Sarmiento: Pienso que cada cual en la medida de sus posibilidades e intereses debería involucrarse para hacer una diferencia positiva en nuestro país. Cuando se tienen buena voluntad y ganas de trabajar, todo es posible. Semana.com: En lo personal, ¿qué tan importante es la música en su vida cotidiana? Fanny Gutiérrez de Sarmiento: Importantísima. Siempre he sido una persona muy alegre y musical. Adoro la música como fondo de la vida diaria, no podría imaginarme una celebración de cualquier tipo sin música de fondo.