Una francesa acusó al cineasta francopolaco Roman Polanski de haberla violado en 1975, en Suiza, cuando ella tenía 18 años, en un testimonio publicado por el diario Le Parisien a pocos días del estreno del nuevo filme del cineasta franco-polaco, bajo investigación de la justicia estadounidense.  Valentine Monnier, cuyas acusaciones se suman a las de otras mujeres en los últimos años, indica que no ha presentado ninguna denuncia por estos hechos, ahora prescritos. Pero afirma haber decidido hacer pública esta acusación debido al estreno en Francia de la película "Yo acuso", que se refiere a un error judicial, el caso Dreyfus.

"No tenía ningún vínculo con él, ni personal ni profesional y apenas lo conocía", cuenta a Le Parisien esta fotógrafa, que fue modelo en Nueva York y participó en algunas películas en los años 80, como "Tres hombres y un bebé". "Fue de una extrema violencia, tras esquiar, en su chalet, en Gstaad (Suiza). Me golpeó, me golpeó hasta que me rendí y luego me violó haciéndome sufrir todas las vicisitudes", declaró.

Monnier afirma que desde 2017, alentada por el escándalo Weinstein en Estados Unidos, había contado su historia en cartas enviadas a varios responsables, entre ellos a la esposa de Emmanuel Macron y a la policía de Los Ángeles, en California. El gabinete de Brigitte Macron confirmó que había encontrado el correo, que data de 2018, en el que Monnier se queja especialmente "de la ausencia de respuesta de la secretaria de Estado para Igualdad de Género", Marlène Schiappa, otra de los responsables a los que escribió. "Respondimos en febrero de 2018 para decirle que Brigitte Macron no podía intervenir en procesos judiciales y que transmitimos su correo a Marlène" Schiappa, agregó. La secretaria de Estado respondió a la fotógrafa en marzo de 2018 en una carta en la que alabó su valor "por haberse atrevido a romper un silencio" de más de cuatro décadas.  Schiappa "comparte" su dolor, a la vez que señala que "los hechos han prescrito para la justicia francesa", según esta carta comunicada el viernes a la AFP por su oficina. Monnier escribió igualmente a la esposa del presidente francés en 2019 "con respecto a la financiación del ministerio de Cultura a la película de Polanski, Yo acuso. "Le respondimos recurriendo a [el ministro de Cultura] Franck Riester", continuó el gabinete de Brigitte Macron.

El abogado del cineasta, Hervé Temime, afirma a Le Parisien que Polanski "rechaza firmemente toda acusación de violación" y señala que estos hechos alegados de hace 45 años "nunca fueron puestos en conocimiento de la autoridad judicial". Solicitado por la AFP, el abogado no quiso hacer más comentarios de inmediato. Polanski sigue siendo perseguido por la justicia estadounidense en el marco del proceso por malversación de menores iniciado en su contra en 1977.

En 1997, se declaró culpable de haber mantenido relaciones sexuales ilegales con Samantha Geimer, de 13 años. Este único cargo fue el resultado de un acuerdo amistoso con el juez, después de que Polanski fuera acusado inicialmente de cargos más graves, incluida la violación de una menor bajo la influencia de estupefacientes. Condenado a 90 días de prisión, fue liberado después de 42 días. Pero el juez cambió de parecer, estimando que la sentencia era insuficiente. En enero de 1978, Polanski huyó a París y la justicia estadounidense lanzó una orden de captura internacional. Desde entonces ha sido objeto de otras acusaciones, que según el abogado son "infundadas".