Sus profesores solicitaron que la estatua del líder pacifista que reposa en Accra fuera removida, con el argumento de que Gandhi era racista y consideraba a los indios “infinitamente superiores” a los africanos negros. El monumento fue inaugurado en junio pasado cuando en una visita a África el presidente indio, Pranab Mukherjee, pidió a los estudiantes emular los ideales de Gandhi. La armonía duró poco, y más de 1.000 personas firmaron una petición para retirar la estatua. Para reforzar esta iniciativa, los académicos citaron escritos del líder independentista en los que se refería a los sudafricanos negros como ‘kaffirs’, un término ampliamente racista. Rajmohan Gandhi defendió a su abuelo desde el contexto, pues recordó que Nelson Mandela dijo una vez: “Gandhi debe ser perdonado por sus prejuicios en el contexto del tiempo y las circunstancias”.