Kendall Jenner se ha convertido en todo un ícono mundial, no solo porque es una de las modelos más bellas y apetecidas por todas las marcas de alta moda del mundo para que luzca sus nuevos diseños, sino porque es parte de una de las familias más reconocidas de Estados Unidos (Kardashian), quienes han monetizado su vida privada desde hace más de una década con sus realities shows.

La modelo es la penúltima en la cronología de esta familia, siendo ella y su hermana menor, Kylie, las hijas de Caitlyn Jenner, quien antes de hacer su transición conformó el segundo matrimonio de la matriarca del clan, Kriss, quien es un as en el mundo de las estrategias comunicacionales de la familia y ha sabido vender a la perfección las aptitudes y habilidades de cada una de sus hijas, incluso usando los escándalos en los que están envueltas para ganar mucha más fama, sin importar su reputación.

Kendall Jenner tiene 26 años. | Foto: 2019 Ryan Emberley/amfAR

Esta fama le ha valido a Kendall no solo grandes logros laborales y económicos, sino también mucha cercanía con otras luminarias del jet-set internacional, con las que ha compartido, fiestas, eventos especiales y hasta el corazón, pues el perfil de pareja sentimental de la supermodelos es uno de los más altos de la industria, en el que solo aplican hombres poderosos y famosos.

Uno de esos es el cantante puertorriqueño Bad Bunny, quien desde principio de año se le ha visto muy cerca a Jenner y al pasar de los días los dos mostraban mucho más su amistad, que pronto mutó a algo más comprometedor y que se evidenció en las fotos que los paparazzis lograron tomarles, en las que aparecían abrazados y hasta con indicios de besos y caricias, confirmando así su relación.

Kendall Jenner y Bad Bunny afuera de la cena en Sushi Park. (TMZ) | Foto: Semana

Esta es la hora en la que ninguno de los dos ha dicho “te amo” a los cuatro vientos, sin embargo, ni el cantante ni la modelo se limitan a la hora de estar juntos y no ocultan absolutamente nada, como sí sucedía hace un par de meses. Tanto es así que en una pasada aparición pública sucedió un impasse en el que el boricua terminó como el héroe de la única mujer que aún no es mamá del clan Kardashian.

Todo sucedió en el último concierto que dio el rapero canadiense Drake en Los ángeles, Estados Unidos. Allí hubo una asistencia masiva, entre los que hubo algunas luminarias como Kendall y Bad Bunny. Los dos estaban en uno de los balcones VIP, desde donde pudieron disfrutar el concierto sin que sus fans les pidieran fotos o autógrafos. Sin embargo, sí los pudieron grabar desde diferentes dispositivos móviles.

Bad Bunny y Kendall Jenner fueron captados en una cita para montar a caballo. (TMZ) | Foto: Semana

En una de esas grabaciones se ve cómo Kendall está en el piso y el boricua intérprete de Calaíta la está ayudando a ponerse de pie. Testigos del hecho dicen que los dos estaban tan emocionados bailando que la modelo no midió sus pasos y terminó estirada en la gradería, desatando una risa comunal entre sus allegados y aquellos que estaban a su alrededor.

Lo importante del caso es que el boricua estaba ahí para rescatar a su doncella y lo hizo de tal manera que ella, una vez en pie, lo abrazó e intentó hacerle gestos de besos, acercando su boca muy cerca a la de él para terminar diciéndole cosas al oído, que a decir por los videos fueron palabras que le cayeron muy bien al intérprete de Tití me preguntó, quien solo sonreía y le dejaba ver su gusto por tenerla en sus brazos.

El recital de Drake terminó en total normalidad con un público complacido de escucharlo. Por otro lado, la pareja de famosos también salió muy contenta, no solo por haber bailado y cantado éxitos como One Dance, Hotline Bling y Passionfruit, sino por haber compartido juntos, sin ningún tipo de límite, dicha experiencia.