Diego Armando Maradona dice estar curado de la mayor enfermedad de su vida, la drogadicción. Metido entre una piscina, mirando a una cámara, y con voz emocionada, lo dice a todos los ‘maradionianos’, esa legión de seguidores que en Argentina y en todo el mundo lo consideran, no solo el mejor futbolista del planeta, sino todo un dios. “Se van a cumplir ahora doce años que dejé la droga, porque no me dejaba levantarme como me levanto ahora todas las mañanas. Elegí esta vida para mis hijos y nietos y para los que vendrán, que yo todavía no he cerrado la fábrica”, dice el Diego, desde la piscina de su mansión en Dubai, en un video que ha publicado en su perfil oficial de Facebook. Allí, en los Emiratos Árabes Unidos, Maradona parece haber encontrado tranquilidad. Llegó hace cuatro años para dirigir uno de los equipos de fútbol de ese país. No le fue bien como entrenador, pero firmó un contrato como embajador deportivo de ese país para promocionar los eventos deportivos que se disputan en Dubai, como el Abierto de tenis, la Copa del Mundo de equitación o el torneo de golf Desert Classic. En el video, Maradona abre a sus seguidores las puertas de su casa en Dubai y exhibió las fotografías que tiene con Fidel Castro, a quien califica como “el más grande de todos”, o con Hugo Chávez “el mejor discípulo del más grande”. También muestra una carta de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, “ella es mi presidenta”, dice. En virtud de las palabras de Maradona, desde el año 2002 no consume cocaína, la droga que empañó su brillante carrera. Sancionado dos veces por la FIFA por dopaje (en 1991 y 1994), terminó su carrera en 1997. Dos años después, en un reportaje, se lamentó por estar perdiendo su batalla contra la droga. Un año después, viajó Cuba donde se sometió a un tratamiento de rehabilitación. Se hizo amigo de Fidel Castro, a quien en parte le atribuye haber salido de la droga. Maradona, dice que lleva 12 años sin consumir droga.